Los transportistas temen que el Gobierno cambie los peajes por el pago en todas las carreteras

La asociación de transportistas de Madrid pide al Ejecutivo que el mantenimiento de las carreteras se produzca a través del impuesto de carburantes

El fin del peaje por la liberalización de la autopista AP-2, que conecta Zaragoza con el Mediterraneo, supone una buena noticia para los municipios colindantes de esta vía en Aragón,aunque ha despertado la incertidumbre sobre cómo afectará en la economia de la zona. En la imagen, el peaje de Pina de Ebro. EFE/JAVIER BELVER

El peaje de Pina de Ebro. EFE/JAVIER BELVER

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Las barreras de los peajes desaparecen en puntos estratégicos de Aragón y Cataluña. Desde este miércoles permanecen subidas, permitiendo el paso gratuito a todos los usuarios, lo que podría suponer un motivo de celebración, sobre todo para los más asiduos a circular por ellas. Pero no es así.

Los transportistas desconfían de esta iniciativa del Gobierno. El presidente de la asociación de transportistas de Madrid, Antonio Villaverde, ha mostrado en una entrevista en Antena 3 su miedo a que el Ejecutivo decida imponer el pago por uso de todas las carreteras tras el fin de las concesiones a las empresas encargadas del mantenimiento.

«Desde el Gobierno nos dicen que hay un déficit en las partidas presupuestarias de mantenimiento las infraestructuras», ha explicado Villaverde, que teme que este desajuste en las cuentas provoque que, a la larga, se acabe imponiendo un coste cada vez que se use cualquiera de las vías. «Hasta ahora la liberalización es una buena noticia, pero nos crea incertidumbre», ha explicado.

El fin del peaje por la liberalización de la autopista AP-2, que conecta Zaragoza con el Mediterraneo, supone una buena noticia para los municipios colindantes de esta vía en Aragón,aunque ha despertado la incertidumbre sobre cómo afectará en la economia de la zona. En la imagen, el peaje de Pina de Ebro. EFE/JAVIER BELVER
Peaje de Pina de Ebro. EFE/JAVIER BELVER

Con José Luis Ábalos al frente de la cartera de Transportes, la asociación de transportistas madrileña logró el compromiso de este departamento de no imponer el pago por uso. «Ahora con el cambio de ministerio no sabemos qué va a ocurrir», lamenta Villaverde. Y es que un aspecto lo tienen claro: de algún modo se tendrá que financiar el mantenimiento de las vías.

«El peaje es algo que eliges. Hay veces que puede interesar y veces que no. Un pago por uso significa que vas a tener que pagar siempre que circules por la carretera»

Antonio Villaverde, presidente de la asociación de transportistas de Madrid

«Lo que decimos es que en el impuesto que se pagan en los carburantes, la mitad del precio son impuestos. Ahí se paga ya con creces el pago por uso, es decir, de ahí deberían haber sacado el presupuesto para el mantenimiento y la conservación de las infraestructuras», ha explicado el presidente de los transportistas madrileños.

Y ha añadido: «El peaje es algo que eliges. Hay veces que puede interesar y veces que no. Un pago por uso significa que vas a tener que pagar siempre que circules por la carretera». Villaverde ha explicado que, según la información a la que ha podido acceder la asociación que preside, el pago por uso implicaría un coste de 10 céntimos el kilómetro.

«Para un camión que recorra 10.000 kilómetros al mes, un recorrido medio de cualquier camión, esta cantidad supondría mil euros mensuales. Es un disparate, sobre todo para el sector del transporte que ahora está herido de muerte», ha advertido.

El Gobierno prepara el terreno para un nuevo impuesto de circulación

De momento se desconocen cuáles son los planes del Gobierno. La titular de Transportes, Raquel Sánchez, ha asegurado en una entrevista publicada este miércoles en El Periódico que “no se volverán a aplicar peajes como los que había hasta ahora”.

La ministra ha defendido un nuevo modelo “que no genere agravios”. Y aquí es donde encaja el nuevo impuesto que España vendió a Bruselas en su Plan de Recuperación, en el que se comprometió a incorporar una nueva figura tributaria que agravara el uso de las principales carreteras de alta intensidad de la red viaria del país, tanto autopistas como autovías, a partir del 2022.

Sánchez ha advertido que es evidente que “hay que buscar un sistema para poder financiar el mantenimiento de las carreteras”, en la línea de lo que se hace en la gran mayoría de los países de la Unión Europea. “Deberá ser una tarificación justa y equilibrada, un sistema público y homogéneo para el conjunto de España”, ha aclarado.

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