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Boeing hace caja con su tecnología: vende parte de su negocio digital por más de 9.000 millones
Tras la operación, que se ha saldado por más de 9.000 millones de euros, la compañía seguirá conservando sus "principales capacidades digitales"
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Boeing ha vendido su unidad de navegación aérea y activos a Thoma Bravo. La operación se ha materializado por 10.550 millones de dólares, un importe que equivale a 9.190 millones de euros. La transacción afecta a Jeppesen, ForeFlight, AerData y OzRunways, que pasarán a manos de la firma de inversiones de ‘software’.
A pesar de la venta, la compañía seguirá conservando sus «principales capacidades digitales», puesto que aprovechará datos específicos de aeronaves y flotas para ofrecer a los clientes de mantenimiento, diagnóstico y reparación de flotas. La previsión es que la operación, que está sujeta a la aprobación de los organismos reguladores y a las condiciones de cierre habituales, se cierre a finales del año.
El presidente y consejero delegado de Boeing, Kelly Ortberg, ha puesto relieve la transacción dentro de la estrategia de la compañía puesto que les permite centrarse en los negocios principales, complementar el balance y priorizar la calificación crediticia de grado de inversión.
La operación se ha llevado a cabo tras desembolsar 9.190 millones de euros
Boeing también ha recalcado que está trabajando con la firma de inversión con el objetivo de garantizar la fluidez de la transacción para los trabajadores del área afectada por la venta, que incluye una plantilla conformada por 3.900.
Boeing recorte de la deuda
La venta de la unidad de navegación área y activos llega después de que la compañía haya dado a conocer que ha reducido sus pérdidas netas en el primer trimestre hasta los 27 millones de euros, una cifra que contrasta con los 311 millones de euros registrados en el mismo periodo del año anterior.
A lo largo de los tres primeros meses del año, la facturación se ha elevado un 18% hasta superar los 17.000 millones de euros, por encima de los 14.522 millones de euros del ejercicio previo.
El flujo de caja, por su parte, ha registrado un resultado negativo de poco más de 2.000 millones de euros, lo que refleja el aumento de las entregas comerciales, así como la sincronización del capital circulante.
Las pérdidas netas registradas por la compañía se han recortado desde los 311 millones de euros hasta los 27 millones de euros
La deuda total consolidada ha descendido a cerca de 47.000 millones de euros durante el primer trimestre a raíz de la amortización de los vencimientos, en contraposición a los 47.247 millones de euros del último trimestre del año pasado.
Devolución de aviones
A raíz de la política arancelaria impulsada por la administración encabezada por Donald Trump, el fabricante ha comenzado a devolver aviones 737 MAX a Estados Unidos después de ser rechazados por parte de las aerolíneas chinas.
Cabe recordar que el país asiático ordenó a sus aerolíneas no aceptar más entregas de aviones procedentes de Boeing, incluyendo también la paralización de cualquier compra de equipos y piezas relacionados con aeronaves a empresas estadounidenses.
Boeing ha entregado en el primer trimestre del año una veintena de aviones a aerolíneas chinas, la mayoría del modelo 737 MAX y principalmente a China Southern Airlines.
El espacio dejado por el país presidido por Xi Jinping puede ser ocupado por otras empresas, como Malasia Aviation Group, matriz de Malasyia Airlines, que ha entablado conversaciones con Boeing para potencialmente hacerse cargo de los envíos rechazados.
El objetivo de esta compañía es acelerar la modernización de su flota envejecida, por lo que los nuevos aviones deben cumplir los requisitos de cabina de la compañía.
