La plataforma de franquiciados afectados por Carrefour alcanza los 28 supermercados

El grupo de franquiciados que quiere montar una plataforma para defender sus intereses contra Carrefour empieza a sumar adeptos. Un mes después de que un gran franquiciado que ha invertido en 10 supermercados empezara a buscar otros socios que habían tenido malas experiencias como franquiciados de la multinacional, ya son 28 los supermercados que se han unido a la agrupación de afectados.

Según informan los impulsores del colectivo a este medio, se han sumado damnificados distribuidos por todo el territorio, pero con una numerosa presencia del centro y del norte de España. Esta misma semana, ha entrado en la asociación un franquiciado de Cádiz que tiene dos puntos de venta. Dicho empresario ha dado a conocer la plataforma en sur, por lo que los actuales miembros esperan sumar unos cinco supermercados más en los próximos días.

De hecho, aseguran, aspiran a alcanzar los 35 o 40 miembros a lo largo de la semana que viene, ya que han contactado con una veintena más de franquiciados que están pendientes de confirmar su participación en el colectivo. “Tienen mucho respeto y miedo”, aseguran miembros del grupo sobre los afectados reticentes a hacer reclamaciones.

Tal y como ha explicado Economía Digital, algunos gerentes e inversores de franquicias de Carrefour Express han decidido organizarse para defender de forma conjunta sus intereses frente a presuntas malas prácticas y condiciones abusivas planteadas en sus contratos. Una vez hayan encontrado adeptos por todo el territorio, decidirán qué medidas emprender, sean de carácter legal o social. Una de las opciones puestas sobre la mesa sería la posibilidad de presentar una demanda colectiva, aunque cada caso tiene sus particularidades.

En este sentido, varios franquiciados han relatado a este medio sus experiencias y muchos de ellos coinciden en decir que el problema recae en el plan de negocio que les presenta Carrefour. En estos casos, las expectativas de ventas y rentabilidad se alejan de los datos finales que obtienen los franquiciados, según defienden los afectados.

El suministro de mercancías, cuestionado

Por ejemplo, una empresaria de Móstoles se vio obligada a cerrar su tienda tras facturar poco más de la mitad de lo previsto por la cadena de supermercados durante el primer año de vida de la tienda. Sin embargo, estos planes de negocio no son vinculantes, por lo que la compañía gala está blindada jurídicamente ante posibles incumplimientos.

En otros casos, los puntos de conflicto con el franquiciador se dan por fallos en el suministro de mercancías. Una franquiciada que regenta un Carrefour Express en el País Vasco asegura que, en su caso, la tienda “funcionaba bien”, hasta que se abrió un supermercado Dia cerca de su establecimiento y les empezó a hacer la competencia.

“Nos lo comimos todo, no nos ayudaron en nada”, relata la empresaria, que decidió entonces no renovar su contrato de franquicia con Carrefour. A partir de ese momento, siempre según explica, la cadena le cortó el grifo y empezó a sufrir problemas de abastecimiento. “La tienda vendía muchísima leche de la marca blanca, pero había ocasiones en las que solo nos mandaban 6 litros”, critica. Por contra, dice, le seguían llegando referencias que con menos rotación: “De esas tenemos innumerables”.