Los nuevos dueños de Lupo buscan una clientela más rica y exclusiva

La firma Lupo ha cambiado de manos y sus nuevos dueños tienen claro cuál es la línea a seguir ahora: más diseño, mejor calidad y, en definitiva, una apuesta firme por el lujo. La compañía busca una clientela VIP de alto standing y exclusiva. “El objetivo es ofrecer colecciones con productos mejorados, hechos con pieles más buenas, centrándose en un tipo de cliente que reconoce la calidad y el diseño”, subrayan fuentes próximas a la enseña.

Así, con la reciente entrada de Praedium, liderada por Alfonso Cirera, se prevé un cambio no sólo a nivel de producto, sino también de expansión de la red comercial con una nueva tienda en el paseo de Gràcia de la capital catalana. “Barcelona es un mercado potencialmente muy fuerte para Lupo con una afluencia de turistas muy relevante”, señalan los mismos interlocutores.

De momento el nuevo establecimiento –que será el buque insignia de la firma– está en obras, con la previsión de abrir las puertas a finales de mayo o mediados de junio. Pero ésta no es la única tienda que tiene Lupo en España. Además, cuenta con otro espacio en Las Rozas de Madrid, en la calle Mallorca de Barcelona y en el outlet catalán La Roca Village.

Sin romper del todo con la etapa anterior

Este cambio de estrategia –más enfocado en el lujo y en abrir nuevos puntos de venta propios– tiene como fin último crecer en ventas ahora que Lupo cuenta con un apoyo financiero. La firma presentaba el año pasado concurso voluntario de acreedores con un pasivo de 4,5 millones que, finalmente, se ha cobrado una víctima: el fundador y miembro de la familia Morenete, José María. Sólo quedará de la etapa anterior la hermana de José Maria, Mireia, que seguirá trabajando en el área de diseño.

Lupo pretende crecer más con los nuevos propietarios, manteniendo una parte de la historia de la compañía. Se trata de combinar en la dosis exacta lo nuevo y lo viejo para dejar atrás las pérdidas de antaño y comenzar a dibujar una linea de negocio ascendente.