El proveedor de internet que se ha declarado en quiebra tras un ciberataque
El sector tecnológico estadounidense se encuentra en crisis por los fraudes y ciberataques
Empresa de tecnología anuncia la quiebra
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Un famoso proveedor de internet se ha declarado en quiebra después de sufrir un ciberataque mortal. Hablamos de Tilson Technology Management, empresa que opera en Estados Unidos y que dejará de hacerlo una vez consiga vender sus activos después de acumular pérdidas millonarias por un incumplimiento de pago de un cliente.
La quiebra se trata de una situación legal en la que una empresa no puede cumplir con sus obligaciones financieras, es decir, no puede pagar sus deudas a tiempo ni mantener sus operaciones con normalidad. Cuando una empresa se declara en bancarrota, reconoce formalmente su insolvencia ante un tribunal.
A partir de ese momento, se inicia un proceso judicial que puede llevar a diferentes escenarios. Uno de ellos es la liquidación, en la cual se venden los activos de la empresa para pagar a los acreedores en el orden que establece la ley. Otro es la reestructuración, que permite a la empresa reorganizar sus finanzas, renegociar sus deudas y, en algunos casos, continuar operando.
Cabe señalar que la quiebra no siempre significa el cese definitivo de una empresa. Algunas logran recuperarse mediante planes de reestructuración o fusiones, aunque muchas otras desaparecen del mercado. A lo largo de la historia ha habido muchos casos de entidades de éxito que tuvieron que atravesar esta complicada situación. Lego, Apple o Sony son algunos ejemplos.
El referente americano en fibra óptica se declara en quiebra
La compañía especializada en fibra Tilson Technology Management se ha acogido al Capítulo 11 de bancarrota tras un gran golpe financiero provocado por el impago de uno de sus principales clientes. El anuncio oficial se realizó a finales del mes de mayo ante el Tribunal de Quiebras del Distrito de Delaware.
Después de dos décadas de trayectoria en el sector, reportó pasivos por aproximadamente 223 millones de dólares. En el marco de su reestructuración, la compañía ya inició un proceso de venta de activos. Además, tiene el objetivo de asegurar una financiación de 37.5 millones como parte de su condición de deudor, de los cuales ya se han liberado 15 millones mediante una orden judicial provisional.
Según su CEO, Darrell Ingram, la quiebra se originó tras una relación contractual fallida: «Un cliente no logró gestionar sus relaciones con las comunidades anfitrionas ni pagarnos por el trabajo que realizamos, lo que cambió sustancialmente nuestras expectativas de ingresos».
«Durante casi 20 años, Tilson ha ayudado a los clientes a abordar sus desafíos más difíciles de infraestructura de información y comunicaciones. Nuestro negocio principal es sólido, pero necesitamos reajustarnos luego de que un cliente no lograra gestionar sus relaciones con las comunidades anfitrionas ni pagarnos por el trabajo que realizamos», ha confesado el CEO.
La caída de Tilson se suma a una ola de bancarrotas en el sector tecnológico estadounidense por fraudes y ciberataques. Compañías como Everstream y Solid se enfrentan procesos similares, mientras otras, como Wolfspeed, podrían seguir el mismo camino. La crisis financiera que atraviesa esta industria deja en el aire miles de empleos, provocando la necesidad de un cambio radical en el sector.
