Reyal Urbis solicita el preconcurso de acreedores con una deuda de 3.654 millones
La inmobiliaria tiene cuatro meses para evitar entrar en suspensión de pagos
La inmobiliaria Reyal Urbis ha dado el primer paso en el concurso de acreedores al solicitar lo que se denomina ‘preconcurso’. Tendrá cerca de cuatro meses para renegociar su deuda, que asciende a 3.654 millones y tratar así de evitar la antigua suspensión de pagos.
La compañía que preside Rafael Santamaría se acoge a la Ley Concursal tras acordarlo por unanimidad su consejo de administración, según se indica a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Refinanciación
En concreto, la inmobiliaria indica que “ha iniciado negociaciones para alcanzar un acuerdo de refinanciación, o subsidiariamente, para obtener adhesiones a una propuesta anticipada de convenio en los términos previstos ante la citada Ley Concursal”.
Reyal solicita el preconcurso después de que no haya fructificado en acuerdo alguno el proceso de renegociación de deuda que inició hace más de un año con sus bancos, el tercero que la inmobiliaria ha emprendido desde el inicio de la crisis.
211 millones de pérdidas en seis meses
El grupo inmobiliario registró una pérdida neta de 211,3 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supuso incrementar en un 30% sus ‘números rojos’. La cifra de negocio cayó un 7,4%, hasta 51 millones de euros.
Si no se lograse evitar la entrada en concurso de acreedores, este podría ser el segundo más grande de la historia de España, por detrás del que protagonizó Martinsa Fadesa.