Shein, en el punto de mira: consumidores europeos denuncian «técnicas engañosas»

Varias organizaciones europeas de consumidores han denunciado la práctica de "patrones oscuros" por parte de Shein para fomentar el sobreconsumo

Logotipo de Shein. Foto Getty Images

Logotipo de Shein. Foto Getty Images

Shein vuelve a situarse en el ojo del huracán en Europa. Este jueves, la organización europea de consumidores BEUC, junto a otras 25 entidades asociadas, ha presentado una denuncia conjunta contra la firma china de moda ‘online’, acusándola de utilizar estrategias de venta manipuladoras para forzar decisiones de compra no deseadas, basadas en técnicas que, por otra parte, no se enmarcan dentro de la legalidad.

Entre las entidades participantes figuran asociaciones españolas como Asufin, CECU y la OCU, que se han sumado al reclamo ante la Comisión Europea y las autoridades comunitarias de protección al consumidor, que se han unido para formalizar una denuncia en la que, una vez más, Shein vuelve a ser el objeto de todas las miradas.

Los patrones oscuros, la técnica que denuncian las organizaciones europeas contra Shein

Una denuncia que se fundamenta en el uso sistemático de los llamados patrones oscuros, técnicas de diseño digital que tienen como fin alterar la conducta de compra del usuario, llevándolo a gastar más de lo que tenía previsto o a tomar decisiones bajo presión psicológica. Pero, ¿es esto realmente posible? Y de ser así, ¿cómo funcionan estos patrones oscuros?

A grandes rasgos, estos patrones oscuros son técnicas digitales diseñadas para manipular al consumidor. Aunque se emplean en diversas plataformas digitales, su uso en comercio electrónico ha generado especial preocupación. Hablando de casos concretos, un ejemplo es el confirm-shaming, que consiste en presionar emocionalmente al usuario haciéndolo sentir culpable por rechazar una oferta o no participar en una promoción.

Una práctica que es la más habitual, pero ni de lejos la única. Existe también la técnica del scroll infinito, que busca dificultar la navegación clara para mantener al usuario enganchado y expuesto constantemente a nuevos productos. También está presente el nagging, que consiste en enviar constantes recordatorios o mensajes intrusivos para forzar decisiones de compra inmediatas, y otras más habituales en el comercio global, como es la simulación de escasez, que muestra advertencias como “quedan pocas unidades” o “última oportunidad” sin pruebas verificables de que la disponibilidad sea realmente limitada.

Una serie de estrategias respecto a las cuales las organizaciones consideran no solo atentan contra los derechos de los consumidores, sino que además fomentan comportamientos de sobreconsumo, con el consiguiente impacto ambiental y social, lo cual tiene un gran impacto sobre el mercado a nivel global.

Shein, reincidente ante Bruselas

Sin embargo, no estamos ante la primera vez de Shein en esta tesitura. La Comisión Europea ya había iniciado una investigación contra Shein en febrero de este mismo año, alertando sobre posibles falsos descuentos y prácticas de venta poco transparentes. En ese momento, Bruselas otorgó a la empresa un plazo de un mes para explicar y corregir sus procedimientos comerciales antes de que se valorasen posibles sanciones por parte de los organismos competentes de los Estados miembros.

Sin embargo, para la BEUC y las organizaciones firmantes de la nueva denuncia, las medidas adoptadas hasta ahora han sido insuficientes, especialmente en lo que respecta a los patrones oscuros. Según sus estudios, estas tácticas provocan perjuicios económicos directos a los consumidores y, además, contribuyen a inundar el mercado europeo con prendas de vestir poco seguras y de corta vida útil.

Por ello, una de las principales exigencias de las organizaciones es que Shein acredite la autenticidad de los mensajes promocionales que utiliza, como los avisos sobre disponibilidad limitada o los comentarios positivos de supuestos compradores. A falta de pruebas concluyentes, las asociaciones consideran que se trata de simulaciones diseñadas para generar urgencia e influir en el comportamiento de los usuarios.

“Si Shein no toma medidas para rectificar, las autoridades deben intervenir con urgencia”, afirman desde BEUC. De lo contrario, advierten, se seguirá exponiendo a millones de consumidores europeos a prácticas que consideran claramente contrarias a la legislación comunitaria en materia de protección al consumidor.

Suscríbase a nuestro canal de Telegram para estar al tanto de las últimas ofertas y chollos de moda.

Historias como esta, en su bandeja de entrada cada mañana.

O apúntese a nuestro  canal de Whatsapp

Deja una respuesta