El futuro de R: MásMóvil pide suspender la cotización de Euskaltel y la venta forzosa de las acciones que no posee

La intención de MásMóvil es que la cotización de la dueña de R quede suspendida el próximo 17 de agosto, además de hacerse con el 2,33% del capital que no acudió a la opa

Meinrad Spenger, CEO de Másmóvil.

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MásMóvil, a través de Kaixo Telecom, anunció este viernes que hará uso de su opción de venta forzosa para comprar el 2,33% de las acciones de Euskaltel que aún no posee tras fructificar la opa sobre la dueña de la cablera gallega R. Además, también ha anunciado que, tal y como estaba previsto, solicitará que el próximo 17 de agosto se suspenda la cotización del grupo de origen vasco.

El plazo de la OPA terminó el pasado viernes y el 97,66% de los accionistas de Euskaltel acudieron a la misma, situando a MásMóvil como indiscutible propietario del operador. Abanca, propietaria de un 4,48% de Euskaltel, decidió acudir a la opa, por la que se embolsará unos 88 millones de euros.

Ahora, tal y como había anunciado, el nuevo dueño de Euskaltel ejerce esta opción con la idea de controlar totalmente la compañía antes de excluirla de bolsa, según ha notificado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

A por el 100% de las acciones

Por ello, ha puesto en marcha esta iniciativa por la que antes del 27 de agosto adquirirá los títulos que quedaron en remanente, representativos del 2,34% del capital, al mismo precio de 11 euros que en la opa.

«Para la correcta ejecución y liquidación de la venta forzosa, la sociedad oferente solicitará a la CNMV que acuerde suspender la negociación de las acciones de Euskaltel en las Bolsas de Valores de Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia tras el cierre del mercado bursátil del día 17 de agosto de 2021, y que la cotización de las acciones de Euskaltel permanezca suspendida desde entonces hasta que se produzca la definitiva exclusión de negociación», reza el texto.

La sociedad ha recordado que en caso de venta forzosa, los gastos de transacción corren de su cuenta, pero si se ven obligados a ejecutar la compra, corren a cuenta del accionista.

Economía Digital Galicia

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