El jefe de Alcoa, rotundo: "Las pérdidas significativas continuarán"

Alcoa reduce sus pérdidas mientras amenaza con el cierre de la planta de aluminio de San Cibraro (Lugo). Esta jornada, la multinacional americana ha hecho oficiales los datos que adelantó la pasada semana y que indican que en el segundo trimestre del año redujo sus pérdidas a la mitad, hasta los 197 millones de dólares (172 millones de euros), un 51% por debajo del resultado negativo de 402 millones de dólares (352 millones de euros) contabilizado en el mismo periodo de 2019.

El CEO de la compañía, Roy Harvey, indicó que «a pesar de las difíciles condiciones de mercado, nuestro equipo ha reducido los costes, ha aumentado producción, ha mantenido los envíos estables y ha mejorado nuestro balance». El directivo, de hecho, destacó en la presentación de resultados que la compañía cerró el trimestre con un saldo de liquidez de casi 1.000 millones de dólares. En la presentación de resultados del segundo trimestre, el grupo también explica que el ERE en San Cibrao se debe a unas perdidas recurrentes, que van a continuar.

Un año de reducción de pérdidas

La cifra de negocio de Alcoa entre los meses de abril y junio alcanzó los 2.148 millones de dólares (1.882 millones de euros), un 20,8% por debajo de los ingresos de la multinacional en el segundo trimestre del año 2019. En los seis primeros meses de 2020 Alcoa registró pérdidas de 117 millones de dólares (102 millones de euros), lo que supone reducir en un 80,5% los ‘números rojos’ de la compañía en la primera mitad del ejercicio anterior.

Pérdidas significativas en España

La presentación de resultados ha dejado algo claro. De momento, Alcoa no parece dispuesta a valorar la venta de sus dos plantas en desinversión: la que posee en San Cibrao y la de Intalco, en EEUU. Es más, advierte de que las perdidas van a continuar en España.

La compañía engloba la situación de Lugo dentro «de sus acciones estratégicas para lograr costos más bajos y una rentabilidad sostenible». Así, la multinacional americana explica que el pasado 25 de junio inició un proceso de consulta formal de 30 días con el comité de empresa de San Cibrao debido a que sus instalaciones de aluminio «han sufrido pérdidas financieras significativas y recurrentes que se espera que continúen». «La compañía prevé una reestructuración que podría afectar hasta a 534 empleados de la planta de aluminio y que retiene una parte de los activos en operación. No se tomarán decisiones finales hasta que se complete el proceso de consulta formal», comenta la multinacional americana a sus inversores, aclarando que la refinería de alúmina se salva de este proceso.

Alcoa no baraja, tampoco en esta presentación de resultados, la posibilidad de vender San Cibrao. Tampoco de buscar inversores para la otra planta en proceso de cierre que tiene en EEUU, la de Ferndale, en Washington. «El 22 de abril, Alcoa anunció la reducción total de su fundición Intalco Works, se espera que esta se complete en el tercer trimestre. En el segundo trimestre de 2020, la compañía registró cargos de reestructuración de aproximadamente 27 millones de dólares asociados con la reducción, incluidos los despidos de empleados y los costos asociados con la terminación de contratos. Los cargos de reestructuración están basados en efectivo y se espera que se paguen principalmente en el tercer trimestre del año», explica la compañía en la nota de prensa enviada a medios.

Comportamiento ante el Covid-19

Por otro lado, Harvey destacó que el buen comportamiento de la multinacional ante la pandemia del Covid-19. «Estoy orgulloso de la determinación de nuestro equipo global para enfrentar los desafíos creados por la pandeia, centrándose primero en proteger a las personas», indicó.

El CEO también especificó que «a principios de mes, emitimos bonos corporativos a una tasa favorable que nos brinda una mayor flexibilidad a medida que continuamos navegando a través de las incertidumbres económicas actuales«.