Feijóo espera a Urkullu para convocar elecciones el 12 de julio

La oposición se opone a unos comicios que Feijóo quiere convocar el 12 de julio o, como muy tarde, el 19, para anticiparse a un posible rebrote

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Alberto Núñez Feijóo se reúne este jueves con las fuerzas de la oposición, un compromiso que adquirió tras la suspensión de los comicios del 5 de abril, para comunicarles que convocará elecciones en julio. Lo hará con cinco informes bajo el brazo para respaldar su decisión, cuatro de ellos sanitarios y uno de la asesoría jurídica.

Los documentos servirán al presidente de la Xunta para justificar que si espera a otoño para llamar a las urnas y se encuentra con un rebrote del coronavirus, el Gobierno gallego entraría en un limbo legal al agotarse la legislatura sin convocar elecciones.

“Podría llegarse a una situación constitucional y estatutariamente ignota, como podría ser la finalización del plazo normal de la legislatura sin la celebración de elecciones democráticas, con la consecuente crisis de legitimidad del Gobierno, precisamente en un momento de especial necesidad de esa legitimidad para afrontar la plena normalidad institucional y la necesaria reactivación económica”, dice el informe que encargó Feijóo a la asesoría jurídica de la Xunta.

La oposición lleva anunciando varios días que se opondrá a la convocatoria. “Es el único gallego que está pensando en elecciones”, dijo este miércoles Ana Pontón, la portavoz nacional del BNG respecto al líder del PP gallego.

Entre Urkullu y el coronavirus

Feijóo recordó este miércoles, cuando anunció el encuentro con la oposición en rueda de prensa mientras los partidos debatían en la diputación permanente del Parlamento gallego, que la potestad última para decidir cuándo se ponen las urnas es suya. Su fecha predilecta es el 12 de julio, según las fuentes consultadas, lo que conllevaría convocar oficialmente la semana que viene. Al no encontrar apoyos en la oposición este jueves, se tomará unos días para anunciar su decisión.

Un factor clave es Íñigo Urkullu, con el que hablará previsiblemente este jueves. La posición del lehendakari, que también está en diálogo con la oposición para convocar en julio, puede arrastrar la fecha electoral hasta el día 19, pero no más lejos de ahí. El 26 de julio está descartado porque invalidaría los propios informes sanitarios de la Xunta, que ven posibilidades de rebrote en la segunda quincena del mes por la mayor movilidad al finalizar la desescalada y por la llegada de visitantes de otros territorios.

La oposición, de uñas

Dirigentes del PP ya habían sugerido a Feijóo celebrar elecciones lo más pronto posible, aprovechando el impulso de la sobreexposición televisiva del presidente de la Xunta durante los dos últimos meses, la desaparición de Vox y Ciudadanos en la comunidad durante la pandemia, y la baja penetración que tuvo el Covid-19 en Galicia, afectando a un 1% de la población si se atiende al estudio epidemiológico del Gobierno gallego, o a un 2% si se atiende al del Ejecutivo central.

PSdeG, BNG y Podemos se opondrán frontalmente a los comicios amparándose en la situación de riesgo sanitario. Antón Gómez-Reino, el candidato de Galicia en Común y líder de Podemos en Galicia, amenazó incluso este miércoles con emprender acciones judiciales si las elecciones se convocaban en julio. En realidad, fue el acuerdo con el Ejecutivo que conforman PSOE y Unidas Podemos para el decreto del actual estado de alarma el que permitiría ahora convocar elecciones.

Tampoco tiene fácil el líder socialista Gonzalo Caballero justificar su negativa a las urnas, pues fue el último en descolgarse de la convocatoria del 5 de abril, argumentando incluso que también se votó tras los atentados del 11 de marzo en Madrid. Este miércoles consideró “irresponsable” llamar a las urnas en julio y lamentó que “la principal preocupación” de Feijóo en estos dos meses “fue siempre la cuestión electoral”.

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