España es el segundo país con más ‘ninis’ de toda Europa

Un informe mundial de la OCDE revela que el 22% de los jóvenes españoles de entre 18 y 24 años ni estudian ni trabajan, tres puntos más que el año anterior

Una profesora imparte una clase de matemáticas en el IES Simone Veil de Paracuellos del Jarama, Madrid. España es el segundo país con más ninis de Europa según la OCDE. EFE

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El volumen de jóvenes españoles que ni estudian ni trabajan continúa creciendo año tras año. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha advertido en su último informe global sobre educación que España es el segundo país con peores datos en esta categoría de toda Europa, solo por detrás de Italia.

Los analistas han observado que un 22% de los jóvenes de entre 18 y 24 años formaban parte en el año 2020 del denominado grupo de los ‘ninis’ porque no tenían un puesto de trabajo ni tampoco estaban recibiendo formación de manera oficial. La cifra supone casi seis puntos de diferencia con respecto a la media general de los principales países del mundo.

Este colectivo se ha multiplicado con la entrada en escena de la pandemia de coronavirus. En apenas un año, el dato ha crecido en casi tres puntos con respecto al 19,2% registrado en 2019. La cifra coloca a España entre los peores territorios de Europa y al mismo nivel que otros países como México, Costa Rica o Colombia en el escenario internacional.

La situación de la educación española contrasta con las cifras que presentan otras grandes potencias europeas. Holanda, Alemania y Suiza presentan los mejores datos a nivel global. En los tres casos, el porcentaje de ‘ninis’ se ha situado por debajo del 10% a pesar del impacto de la pandemia.

España, el país con más repetidores en la educación secundaria

Los datos sobre la situación laboral y académica no son el único punto débil de España en el análisis elaborado por la OCDE. La institución también ha colocado a España en cabeza en la clasificación de los países que cuentan con más alumnos que repiten de curso cada año en la educación secundaria.

El informe revela que el 8,7% de los jóvenes matriculados en la ESO no ha logrado avanzar al siguiente nivel. Son casi siete puntos por encima del 1,9% de la media de las principales potencias del mundo que forman parte de la OCDE. Se trata del peor resultado de la clasificación.

En el caso del Bachillerato, el porcentaje es algo más moderados. El 7,9% del alumnado de la última fase educativa antes de la universidad repiten curso en España, frente al 2,9% del conjunto del mundo. Solo la República Checa ha protagonizado unas cifras peores en el año 2020.

Este fenómeno se ha cebado especialmente con los chicos. El 60% de los alumnos que repiten curso en España pertenecen al sexo masculino. El dato, en este caso, sí que se sitúa muy cercano a la tendencia global.

La exministra de Educación, Isabel Celáa, es la principal responsable de los cambios en la reforma educativa del Gobierno. EFE

La valoración de la OCDE ha salido a la luz, justo después de que el Gobierno aprobado ya su reforma del sistema educativo. La denominada ‘Ley Celaá’ incorpora algunas novedades como la posibilidad de que los alumnos puedan graduarse, a pesar de acumular algunos suspensos, siempre y cuando reciban el visto bueno por parte del claustro educativo.

La normativa persigue también limitar el número de veces que los alumnos pueden repetir para que únicamente lo hagan en una ocasión en Primaria y en otra en Secundaria con el objetivo de apostar por otros mecanismos de apoyo y refuerzo que permitan mejorar el nivel académico de los más jóvenes.

El desempleo juvenil se ceba con las personas sin formación

Otra de las evidencias del estudio es la dificultad que tienen los jóvenes sin formación para incorporarse al mercado laboral. La tasa de paro para las personas de entre 25 y 34 años con estudios inferiores a la ESO es del 27,6% en España. Son 12 puntos por encima de la media del conjunto de la OCDE que también ha crecido tras la pandemia.

Precisamente, el Consejo de Ministros acordó la semana pasada su nueva Ley de Formación Profesional (FP) para intentar acabar con la lacra del paro juvenil y dar una alternativa laboral a los jóvenes que no continúan con sus estudios rumbo a la universidad. La normativa está dotada con un presupuesto de 5.000 millones.

El Gobierno creará así una nueva cartera de estudios de FP en España y apostará de forma decidida por la educación dual para que los alumnos puedan realizar hasta el 35% de las horas en las propias empresas.

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