PortAventura recorta en seguridad privada: 57 vigilantes pasan a auxiliares con menos funciones
El hecho de que los vigilantes de seguridad pasen a ser auxiliares implica una capacidad de intervención más reducida, así como cambios en su jornada laboral
Nuevo conflicto laboral en PortAventura. Tras las protestas que protagonizaron la pasada primavera los empleados que conforman la plantilla del parque de atracciones catalán, el complejo se enfrenta a una nueva problemática: el recorte de cerca de 60 vigilantes de seguridad.
Así lo recoge Crónica Global, que concreta que la intención de la compañía es recortar 17 vigilantes que forman parte del personal fijo de PortAventura y 40 de carácter fijo discontinuo, que desempeñanan labores de refuerzo durante los meses en los que las instalaciones abren al público.
De esta manera, los vigilantes de seguridad afectados pasarán a ejercer como auxiliares, lo que implica una capacidad de intervención más reducida, así como cambios en su jornada laboral.
Conflicto con los trabajadores de PortAventura
Los sindicatos UGT y CCOO convocaron hace algunos meses una huelga en PortAventura con el objetivo de reclamar mejoras en las condiciones laborales y salariales. La protesta llegó después de la huelga convocada tan solo un mes antes y que contó con un seguimiento del 80%, según UGT,
En el marco de las protestas, los sindicatos aseguraron que PortAventura acumula un «largo historial de infracciones laborales graves y reiteradas». En este sentido, aseveraron que la compañía incumple los descansos y expone a riesgos psicosociales graves a su plantilla de empleados.

También denunciaron el incumplimiento de los plazos de entrega de calendarios laborales, así como excesos de jornada laboral no reconocidos ni compensados y deficiencias en materia de prevención de riesgos laborales.
Mejoras en las condiciones laborales
Finalmente, los colectivos de trabajadores optaron por desconvocar la huelga tras alcanzar un acuerdo con la empresa. El pacto entre las dos partes llegó después de que se celebraran varias reuniones en las que medió la Conselleria de Empresa y Trabajo de la Generalitat de Catalunya.
La empresa y los trabajadores pactaron «mejoras sustanciales» de las condiciones salariales y de tiempo de trabajo, si bien señalaron que el acuerdo reflejaba la voluntad compartida de continuar dialogando para avanzar en el proceso de negociación del nuevo convenio colectivo.
La empresa y los trabajadores trasladaron su voluntad compartida de continuar dialogando para avanzar en el proceso de negociación del nuevo convenio colectivo
El director general de Port Aventura World, Fernando Aldecoa, se mostró convencido de que las medidas acordadas mejorarán «significativamente» la calidad laboral del equipo. También celebró que el preacuerdo permitiera al parque operar con normalidad de cara al puente de mayo.
Tres décadas de historia
El complejo celebró a inicios de año sus 30 años de historia. Entre las distintas actividades que programó para conmemorar la efeméride destacan el estreno de un recorrido por los distintos mundos de Port Aventura, pero también la renovación del espectáculo multimedia ‘FiestAventura’ con la incorporación de drones.
También sumó una parada formada por carrozas que representan cada una de las áreas de PortAventura y el espectáculo ‘Un viaje fascinante’ en el Gran Teatre Imperial. A la vez, desde entonces, ofrece una nueva decoración, merchandising y oferta de restauración renovada.
El parque de atracciones ha aportado desde su apertura en 1995 más de 17.200 millones de euros a la economía catalana y ha invertido 1.800 millones de euros
En las tres décadas de andadura, PortAventura ha recibido a más de 100 millones de visitantes y ha generado en torno a 24.000 empleos tanto directos como indirectos. En este contexto, el director general de Port Aventura reivindicó el papel del complejo y aseguró que es un referente en la industria del entretenimiento y un motor de desarrollo para la economía catalana.
Según un informe elaborado por la consultora PwC, el parque de atracciones ha aportado desde su apertura en 1995 más de 17.200 millones de euros a la economía catalana y ha acometido una inversión de 1.800 millones de euros, lo que equivale a 600 millones de euros anuales. Ls cifras también evidencian el arraigo territorial del proyecto, dado que el 92% del impacto económico permanece en Tarragona, donde se ubican las instalaciones.