Los mejores faros para andar en bicicleta con total seguridad

La seguridad es el primer punto a tener en cuenta al momento de salir a andar en bicicleta. Y no hablamos solo de llevar casco, sino también de la vital importancia de contar con luces traseras y delanteras en el rodado.

Las funciones de estas luces no es solo poder visualizar el camino, sino también ser visible para los peatones, conductores de coches o buses y otros usuarios de bicicletas.

Por ello las luces pueden ser de una luminaria o pueden intercambiar entre el blanco y el rojo, con diferentes tonos de intensidad y con la posibilidad que parpadee para crear un alerta lumínico con suficiente anticipación.

Cabe recordar que muchas luces tienen una potencia alta, y puede ser peligroso para quien se cruce con el camino de la bicicleta.

Por ello, si no es necesario iluminar el carril bici o la carretera, se sugiere que la luz se dirija en unos 45º grados desde el manillar hacia el suelo, para que sea visible pero sin perjuicio del que viene enfrente.

Además de conocer la intensidad de la luz, si puede o no cambiar de color, cabe saber si está dotado de una batería recargable o si necesita pilas.

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Con unos sencillos pasos cualquiera de estos focos para bicicletas queda incorporado al manillar, y son muy fáciles de extraer para poder cargar la batería con su puerto USB. Gracias a estas luces, la seguridad está garantizada.

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