El Espanyol paga a plazos a los jugadores para aliviar sus cuentas

El Espanyol continuará con su modalidad de pago diferido para aliviar la deuda que arrastra el equipo desde la construcción del estadio de Cornellà. El club paga sólo el 40% del salario de los jugadores cada mes y aplaza el otro 60% a final de temporada cuando factura los derechos de televisión y recibe los pagos de los principales compromisos publicitarios.

El esquema de pago fue consensuado hace tres años para que el club pudiera reducir la deuda por la construcción del nuevo estadio, que terminó costando un 50% más de lo presupuestado inicialmente, y los compromisos que mantiene con Hacienda, con quien ha llegado a un acuerdo para reprogramar los pagos.

Algunos jugadores han manifestado su malestar por un retraso adicional en las retribuciones que se ha producido en los últimos dos meses pero el club finalmente regularizó los pagos el pasado mes de abril, según comentaron fuentes cercanas al equipo. “No ha habido un retraso generalizado. Tal vez ha habido algún caso puntual, pero ahora ya está todo solucionado”, explica el consejero del Espanyol Víctor Malet.

Las ganancias de Osvaldo

Además de las tensiones generadas por los pagos aplazados, los conflictos económicos también han ascendido hasta la cúpula directiva. Las plusvalías generadas por el traspaso de Osvaldo a la Roma han enfrentado a miembros de la junta. Algunos directivos financiaron la adquisición del jugador argentino en 2010 y pusieron 5 millones de euros sobre la mesa para hacer posible la operación.

Con su venta en verano pasado a la Roma, el Espanyol hizo caja con 17,5 millones de euros, pero buena parte de ese dinero todavía no ha ingresado a las arcas del club porque algunos consejeros no han entregado partes de las ganancias obtenidas con la operación.