Bruselas avala la ‘excepción ibérica’ para España y Portugal a falta de detalles técnicos

España y Portugal ya tienen el visto bueno para aplicar su 'excepción ibérica' aunque faltan detalles por concretar

La ministra Ribera con su homólogo portugués

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El atasco de la denominada ‘excepción ibérica‘ parece que llega a su fin. Así lo ha confirmado el primer ministro portugués, António Costa, que ha explicado este lunes que la Comisión Europea ha dado luz verde a la propuesta de España y Portugal de poner un techo al precio del gas para, de esta manera, controlar el mercado eléctrico. No obstante, desde la CE advierten de que todavía faltarían algunas cuestiones técnicas por resolver.

En concreto, el mandatario portugués ha señalado que «hoy mismo por la mañana la Comisión Europea dio luz verde a la propuesta portuguesa y española para evitar la contaminación del precio de la electricidad por la subida gas. Es una medida de gran alcance». Asegura que «estamos en este momento coordinando con el Gobierno español cómo aprobamos la respectiva legislación, y haremos todo para poder hacerlo ya mañana», ha añadido en declaraciones a la cadena estatal RTP.

De esta manera empieza a desatascarse una situación que llevaba días empantanada, sobre todo en la falta de los detalles técnicos que, no obstante, todavía parecen un escollo que se debe salvar. Así al menos lo reflejaba esta mañana la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.

Sobre esta situación, el diario El Mundo también se hacía eco este lunes sobre la aprobación de la medida por parte de la Comisión Europea, aunque explicaba que todavía quedaban unos flecos técnicos que resolver, algo que no han aclarado el Gobierno español, y tampoco el portugués.

De hecho, la ministra Ribera explicaba esta mañana a la televisión pública que la idea era tener todo listo para que mañana se pudiera llevar a Consejo de Ministros y, posteriormente, se pudieran explicar las medidas concretas.

Una medida sin precedente

La expectativa que hay sobre la ‘excepción ibérica’, que tiene como objetivo rebajar el precio final de la luz -gracias a la intervención de los precios del gas que se usa como tecnología para los ciclos combinados-, se ha ido apagando con el transcurso de los días y la acumulación de retrasos. De hecho, se esperaba que esta medida estuviese aprobada el pasado 3 de mayo, pero por cuestiones técnicas finalmente no se aprobó.

Junto con esta aprobación ahora faltan todos los detalles para saber cómo será su aplicación final, a quiénes afectará, quiénes serán los que paguen la diferencia del tope… cuestiones que no se conocerán hasta su desglogue en Consejo de Ministros.

Raúl Masa

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