Extinción de condominio: qué es y cómo funciona

Hay varias situaciones en que dos o más personas comparten la titularidad de un bien inmueble, o sea una casa, un piso o una finca rural, y desean poner fin a esta situación de copropiedad.

Esto puede suceder cuando hay una herencia a repartir, o si se produce un divorcio en una pareja, o que sea la extinción de una sociedad comercial en la que se han adquirido propiedades.

En este caso se produce un proceso legal que se llama extinción del condominio, y que se gestiona a través de estos pasos.

1. Acuerdo entre los copropietarios

En primer lugar, los copropietarios deben ponerse de acuerdo sobre la voluntad de extinguir el condominio. Este acuerdo puede establecerse en un documento formal, como una escritura pública, un contrato privado o un acuerdo de partición.

2. Partición del bien

Una vez acordada la extinción, se procede a la división del bien inmueble entre los copropietarios.

Esta división puede realizarse de varias formas, como la adjudicación de partes específicas del inmueble a cada copropietario o la venta del bien para luego distribuir el producto entre los copropietarios según sus participaciones.

3. Escritura pública

Si la extinción implica la transmisión de derechos de propiedad, como en el caso de una venta, es necesario formalizar el acuerdo mediante una escritura pública ante notario.

Esta escritura establecerá los términos de la extinción y, en su caso, la adjudicación o venta del bien inmueble.

4. Inscripción en el Registro de la Propiedad

Una vez otorgada la escritura pública, es importante inscribir la extinción de condominio en el Registro de la Propiedad correspondiente.

Esto garantiza la oponibilidad del acuerdo frente a terceros y proporciona seguridad jurídica a los copropietarios.

Es importante destacar que el proceso de extinción de condominio puede variar dependiendo de las circunstancias particulares de cada caso y de la normativa aplicable en la jurisdicción correspondiente. Por ello, es recomendable contar con el asesoramiento de un profesional del derecho, como un abogado especializado en propiedad inmobiliaria, para llevar a cabo este proceso de manera adecuada y conforme a la legislación vigente.