BBVA defiende la opa al Sabadell: "Concentración y competencia no son siempre dos caras de la misma moneda"

El economista jefe del BBVA y director de su servicio de estudios, Jorge Sicilia, ha asegurado que «concentración y competencia no son siempre dos caras de la misma moneda«, una defensa de la opa lanzada por su entidad para hacerse con el Banco Sabadell, que ha sido autorizada por la autoridad de Competencia y que ahora mismo estudia el Consejo de Ministros, donde se podrían imponer condiciones adicionales.

Durante una jornada sobre los retos del sector financiero organizada por el Grupo Parlamentario Sumar en el Congreso, Sicilia no ha hecho referencia explícita a la operación que agita desde hace un año el sistema bancario (y político) español, pero ha subrayado que, si bien la concentración es fácil de medir, no lo es tanto la competencia en un momento en que la digitalización permite a numerosos actores concurrir en el mismo mercado.

«La concentración y la competencia no son siempre dos caras de la misma moneda. En muchas ocasiones no guardan relación. La concentración es muy fácil de medir, no recoge cuestiones para la competencia como barreras de entrada, contestabilidad del mercado o estructuras de coste para las empresas que pueden hacer que sea mucho más eficiente», ha señalado el economista.

Pero la competencia no puede resumirse a un único indicador, ha dicho, aunque las autoridades de competencia cuentan con «muchísimos recursos y muchos años de estudio» con otros indicadores y análisis que incorporan dinámicas competitivas de mercado.

«Hoy en día hay bancos que entran en el mercado español y de la noche a la mañana tienen casi cinco millones de clientes y compiten en el sistema bancario. La digitalización es importante no solo por eso, sino porque incorporan dinámicas competitivas en el mercado. Ese banco puede estar en cualquier sitio. Aumenta la disciplina de mercado para los bancos porque con un clic te puedes cambiar«, ha señalado.

Así, a juicio del economista, «hay muchísimos elementos y las autoridades de competencia así lo atestiguan para decir claramente que en el mercado bancario español hay muchísima competencia«.

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) autorizó a finales de abril la opa hostil del BBVA sobre el Banco Sabadell, con una serie de compromisos negociados con la entidad de origen vasco y relacionadas, fundamentalmente, con el acceso a crédito de las pymes, el principal nicho de mercado de la marca catalana.

Sin embargo, ante la polvareda política que ha levantado la operación, el Gobierno decidió lanzar, por un lado, una inédita consulta pública sobre la posibilidad de elevarlo a Consejo de Ministros y, finalmente, el titular de Economía, Carlos Cuerpo, resolvió hace unas semanas que será La Moncloa quien tenga la última palabra sobre las condiciones para la adquisición.

El Gobierno dispone de un plazo de 30 días naturales, hasta el 27 de junio, para que el Consejo de Ministros estudie y decida si mantiene las condiciones como están, las alivia o las endurece.

La jornada ha sido organizada por el partido de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, quien ha inaugurado la sesión manifestando su rechazo a la opa. «No puede ser que toda la sociedad catalana, hasta la Iglesia, esté de acuerdo en que esta operación no es correcta y caminemos en esta dirección», ha asegurado.

«No puede aceptarse que, en nombre del mercado, se pongan en riesgo miles de puestos de trabajo», ha asegurado la vicepresidenta. Además de la posible pérdida de trabajo (entre 4.000 y 10.000 empleos, ha dicho la ministra de Trabajo), Díaz se ha manifestado en contra de la operación por la «absoluta concentración bancaria de riesgo sistémico» que supondría, además de los efectos sobre la «exclusión financiera» y el encarecimiento que pueda suponer para la financiación de las pymes y el resto de servicios a los hogares.