Emili Rousaud (Factorenergia) guarda en un cajón sus planes de salir a Bolsa: "Está absolutamente aparcado"

Después de poner en pausa y apuntar hacia la posibilidad de reactivar sus planes de salida a Bolsa en diversas ocasiones, Factorenergia ha optado por guardarlos en un cajón. El CEO de la compañía catalana ha señalado que el escenario actual no es el más propicio para materializar la operación y ha sido tajante: «Está absolutamente aparcado».

La firma del sector energético preparó su debut bursátil al arrancar el 2021, sin embargo, al llegar el verano optó por posponerla para el final del año. «Hicimos un esfuerzo sobre humano para salir a Bolsa», ha explicado en el transcurso de la presentación del libro ‘La fe del emprendedor’, que está escrito por el periodista Manuel López y pone el foco sobre la historia del fundador de Factorenergia y la compañía.

Rousaud ha explicado que los movimientos geopolíticos previos a la invasión rusa de Ucrania comenzaron en verano, lo que motivó que el precio del gas se comenzara a disparar hasta alcanzar valores que no se habían apreciado en las dos últimas décadas. «Decidimos dejar la salida a Bolsa porque era un suicidio, desde entonces no nos lo hemos vuelto a plantear», ha insistido.

Sequía de salidas bursátiles

Más allá de la coyuntura global, ha enmarcado el enfriamiento de los planes a la sequía de salidas a Bolsa que actualmente está sufriendo Cataluña, pero también España. En este sentido, ha puesto como ejemplo el caso de la empresa especializada en la producción de masas de pan congeladas Europastry, que se decantó por cancelar su debut bursátil por la inestabilidad de los mercados y la situación geopolítica internacional.

Emili Rousaud i Parés, fundador y CEO de Factorenergia

También ha hecho referencia a la opa de exclusión de Bolsa que Inoc, una sociedad de carteras propiedad de la familia Serra, se propuso acometer sobre el Grupo Catalana Occidente, después de cerca de tres décadas de cotización en el mercado continuo.

Gestión financiera conservadora

Otro de los asuntos que ha abordado ha sido la gestión financiera de la compañía. «Tiendo a hacer unos presupuestos muy conservadores», ha reconocido para acabar poniendo el acento sobre la volatilidad del sector energético. El autor del libro ha coincidido con la afirmación y ha subrayado que la mentalidad financiera del consejero delegado de Factorenergia contempla un sistema de cero deuda y evita quemar capital.

En este sentido, ha sacado pecho del estado financiero de la empresa, que desde el 2007 nunca ha perdido dinero a excepción del año 2021, cuando los números rojos ascendieron a 4 millones de euros. Según sus últimos resultados presentados, obtuvo un beneficio de 40 millones de euros en 2023, pero redujo la facturación hasta los 650 millones de euros.

El futuro pasa por la internacionalización

El empresario también ha puesto el foco sobre el futuro de la compañía que, según ha destacado, pasa por la internacionalización. Después de considerar que Factorenergia tiene una cierta limitación de crecimiento en el mercado español, al competir con grandes comercializadoras como Iberdrola o Naturgy, apuesta por crear un modelo de negocio «eficiente» y exportarlo a otros países.

Otro ingrediente esencial en el presente y el futuro de Factorenergia es la inteligencia artificial, que se está utilizando especialmente en la atención al cliente. «Nuestra visión es poder proporcionar al cliente una buena experiencia y que sea rentable», ha señalado antes de apuntar que apuestan por el desarrollo de tecnología propia.

«Cuando alguien llama a la empresa, puede creer que está hablando con una persona, pero en muchas ocasiones no lo es, es un asistente virtual al que le hemos añadido incluso un sonido de fondo de ruido de teclado», ha zanjado.