Las grandes empresas de la zona euro vaticinan un estancamiento por la inflación
Las grandes empresas de la eurozona ven una ralentización en el tercer trimestre y una contracción en el cuarto
Trabajador en una industria metalúrgica. Pixabay.
Las grandes empresas de la zona euro ven un estancamiento en el tercer trimestre y una contracción en el cuarto trimestre de este año, por la caída de las ventas y la producción debido al aumento de los costes y a la bajada de la demanda.
El Banco Central Europeo (BCE) ha publicado este viernes los resultados de los contactos de su personal con representantes de las 69 mayores empresas de la zona del euro entre el 26 de septiembre y el 6 de octubre.
Detectan una ralentización de la actividad
Estas empresas han detectado una notable ralentización de su actividad empresarial, consistente con el estancamiento, en el tercer trimestre debido al encarecimiento de los costes de producción y por la caída de la demanda.
Por ejemplo, han caído las ventas y/o la producción, sobre todo, de las empresas de sectores que utilizan mucha energía para producir. Asimismo, las empresas del sector de bienes de consumo también han bajado sus ventas y/o su producción.
Los expertos avisan de esta tendencia hasta 2024
Expertos en previsiones económicas consultados por el Banco Central Europeo (BCE) han revisado al alza sus pronósticos de inflación general en la zona del euro hasta 2024 y prevén un estancamiento económico en 2023.
Los expertos que ha consultado el BCE prevén en 2022 un crecimiento del 3% (2,8% en la encuesta anterior), en 2023 del 0,1% (1,5%), en 2024 del 1,6% (1,8%) y a largo plazo, que es en el 2027, del 1,4% (1,5% en la encuesta anterior).
En cuanto a la inflación, pronostican que en la eurozona será del 8,3% en 2022 (7,3 % en la encuesta anterior), del 5,8% en 2023 (3,6%), y del 2,4% en 2024 (2,1%). Incluso, vaticinan una inflación media a largo plazo, en 2027, del 2,1% (2,2% en la encuesta anterior del tercer trimestre).
Esta revisión al alza refleja principalmente los precios más elevados de la energía y los alimentos, pero también un encarecimiento de otros productos a los que se han traspasado el aumento de estos precios y que prevén un aumento mayor de los salarios.
