El Mes Social de CaixaBank moviliza a más de 18.000 voluntarios y transforma la vida de 112.000 personas
El ‘Mes Social’ de CaixaBank vuelve a batir récords de participación e impacto solidario en toda España
Los voluntarios del Mes Social de CaixaBank. Foto: CaixaBank
El compromiso social vuelve a estar en el centro de la acción de CaixaBank. Más de 18.100 personas de todas las comunidades autónomas se han sumado al ‘Mes Social’ de Voluntariado CaixaBank, una iniciativa que ha logrado transformar la vida de 112.000 personas en situación de vulnerabilidad durante el pasado mes de mayo. Este esfuerzo masivo refleja el firme propósito de la entidad financiera de estar al lado de quienes más lo necesitan, en cualquier rincón del país.
Gracias a la organización de 2.580 actividades solidarias en ámbitos como la educación, la digitalización, el medioambiente, la cultura, el deporte y el acompañamiento, el programa ha logrado crear una verdadera red de solidaridad. En este proceso, han colaborado más de 1.282 entidades sociales locales, que han aportado su conocimiento del terreno para identificar las necesidades concretas de cada provincia. Estas acciones no solo han permitido ayudar a miles de personas, sino también acercar a los voluntarios a realidades que a menudo permanecen invisibles.
La tercera edición del ‘Mes Social’ coincide con el 20 aniversario de la Asociación de Voluntarios de CaixaBank, y ha contado también con el apoyo de la Fundación “la Caixa”. El crecimiento de la participación es un dato significativo: un 9% más de voluntarios respecto a la edición de 2024, lo que refleja un creciente interés de la ciudadanía por formar parte de este proyecto transformador.
Acciones con un impacto real en el día a día de las personas vulnerables
Uno de los ejes fundamentales de este proyecto es la cercanía a las personas. Los voluntarios han diseñado actividades adaptadas a las distintas circunstancias de los colectivos vulnerables. En Arona (Tenerife), por ejemplo, se celebró una jornada de cuentacuentos interactivos, ofreciendo a jóvenes en riesgo de exclusión la oportunidad de acercarse a la lectura de manera lúdica y enriquecedora.
En Valencia, el deporte se convirtió en herramienta de integración gracias a una jornada de fútbol solidario organizada junto a Save the Children y la Fundación Valencia CF, donde niños y niñas vivieron la experiencia de ser futbolistas profesionales por un día. Y en Bilbao, cuatro niños de la Fundación Fidias participaron en el paseíllo inicial de la gran final del manomanista de pelota, acompañados por los voluntarios de CaixaBank, quienes velaron por que la jornada transcurriera de forma inolvidable.
El acompañamiento a personas mayores es otro de los pilares de este proyecto. En Sevilla, los voluntarios compartieron una tarde de cine y conversación con personas mayores en el Cine Cervantes, ofreciendo momentos de compañía y recuerdos compartidos. En la Región de Murcia, más de 150 voluntarios repartieron 600 flores en centros de mayores, regalando sonrisas y momentos de felicidad a quienes más lo agradecen. En Barcelona, la tradicional ‘Festa de la Inclusió’ permitió a decenas de voluntarios compartir juegos y talleres con los usuarios de la Fundación Via Guasp, reforzando la importancia de la integración social.
Un compromiso social que crece cada año
El proyecto Voluntariado CaixaBank se ha consolidado como una de las mayores plataformas de acción solidaria de nuestro país. Lo integran empleados, exempleados, familiares, amigos, clientes y cualquier persona que desee sumarse a esta red de ayuda. Con una trayectoria de 20 años, la asociación trabaja junto a más de 2.500 entidades sociales con el objetivo de llegar cada año a un mayor número de personas. En el último ejercicio, el programa ha beneficiado a más de 433.000 personas vulnerables en España.
El éxito del ‘Mes Social’ y de Voluntariado CaixaBank es una muestra del compromiso real y continuo de la entidad con la sociedad. Más allá de su labor financiera, CaixaBank entiende el voluntariado corporativo como una herramienta poderosa para responder a los retos sociales, contribuir al bienestar de las comunidades y reforzar los lazos de solidaridad que las sustentan.
Año tras año, este proyecto sigue demostrando que el voluntariado transforma no solo a quienes reciben la ayuda, sino también a quienes la prestan. Un verdadero ejemplo de cómo, sumando pequeños gestos de miles de personas, es posible lograr un gran cambio colectivo.