Red Eléctrica replica a Iberdrola y Endesa y asegura que ya está habilitando renovables para controlar la tensión
La compañía segura que operar con un valor máximo de 420 kV, como piden las eléctricas, multiplicaría los costes
La presidenta no ejecutiva de Redeia, Beatriz Corredor; el CEO de Redeia, Roberto García Merino, y la directora general de Operación de Red Eléctrica, Concha Sánchez, ofrecen una rueda de prensa en la sede de Red Eléctrica en Tres Cantos
Red Eléctrica ha habilitado en las últimas semanas a las primeras plantas renovables que podrán contribuir al control dinámico de tensión del sistema eléctrico, en línea con el nuevo procedimiento de operación (P.O.) 7.4. solicitado por el operador del sistema en 2020 y aprobado el pasado mes de junio por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Según ha informado la compañía liderada por Beatriz Corredor, el operador del sistema está preparado para que estas instalaciones comiencen a prestar dicho servicio desde el momento en que lo notifiquen.
En este sentido, Red Eléctrica ha explicado que «se mantiene a disposición de los agentes y del resto de plantas renovables a los que invita a realizar sus solicitudes para ser habilitados y poder participar en el nuevo P.O» y añade que, por el momento, «el ritmo de solicitudes viables recibidas desde las instalaciones es aún bajo».
Cabe destacar que esta misma semana, la patronal eléctrica Aelec (Iberdrola, Endesa y EDP) calificó de «perverso» el efecto que podrían tener para el sistema las medidas propuestas por Red Eléctrica para controlar la tensión y evitar un nuevo apagón como el del pasado 28 de abril, de las cuales la CNMC no aprobó todas.
Además, subrayó que el operador del sistema podía implantar el control de tensión dinámico en todas las tecnologías, incluidas renovables, con seguimiento de consignas en tiempo real que aseguraban no se estaba haciendo.
Propuesta que las eléctricas habían realizado y que el operador del sistema se había negado, en palabras de la directora de regulación de Aelec, Marta Castro.
A día de hoy, Red Eléctrica cifra 168 las solicitudes presentadas, de las que 125 corresponden a instalaciones renovables no gestionables. De ellas «24 están ya en condiciones de comenzar las pruebas» y el resto, «o bien declaran no poder seguir consigna de tensión o bien están en fase de completar la documentación necesaria», según explica la compañía.
Además de las plantas renovables no gestionables, el gestor de la red señala que también han presentado solicitudes centrales de generación convencional como ciclos o hidráulicas que ya tienen la obligación de prestar el servicio de control dinámico de tensión en su modalidad básica.
Red Eléctrica da prioridad a las renovables no gestionables
«Por ello, en el proceso se está dando prioridad a las renovables no gestionables, ya que son las únicas que pueden ofrecer nuevos recursos al sistema», indica.
Entre los beneficios de la participación en este nuevo servicio, las renovables habilitadas obtendrán prioridad de despacho y la posibilidad de reducir las rampas máximas de cambio de su producción.
Para su habilitación la normativa del nuevo P.O establece que las instalaciones tienen que acreditar su capacidad técnica para controlar la tensión en dos modos: a través de consignas de reactiva (que piden las grandes eléctricas) y de consignas de tensión.
Esta última modalidad (el seguimiento de consigna de tensión en tiempo real) es la que ofrece flexibilidad y permite que las instalaciones respondan a las variaciones rápidas de tensión que pueden producirse en un sistema eléctrico en plena transformación.
El operador del sistema recuerda que muchas instalaciones renovables, que actualmente deben seguir una consigna de factor de potencia, tienen la obligación normativa de disponer de capacidad técnica para seguir consignas de tensión, con lo que se espera contar con recursos adicionales en el sistema en el corto plazo.
Contesta a las grandes eléctricas sobre los niveles de tensión
Por otro lado, la compañía ha querido hacer hincapié en que los niveles de tensión en los últimos años «no han aumentado», tal y como aseguró la patronal Aelec esta misma semana llegando a asegurar que estas variaciones vienen elevándose desde hace 10 años.
«Los valores medios eran más altos años atrás, pero con la puesta en servicio de elementos de control de tensión en la red de transporte estos valores actualmente son menores«, ha explicado Red Eléctrica.
En este sentido, asegura que lo que sí ha aumentado es la variabilidad de las tensiones, que debe ser controlada por los generadores que aportan al sistema un control de tensión efectivo·. Es decir, apunta a Iberdrola, Endesa, Naturgy, EDP y todas las empresas que producen electricidad en España.
«En el ámbito de la regulación de tensión, Red Eléctrica, cumpliendo con su responsabilidad, ha trabajado y se ha adelantado siempre con medidas para modernizar el sistema y adaptarlo a las necesidades presentes y futuras«, sentencia la compañía que lidera Corredor.
De este modo, pone de ejemplo la propuesta de la modificación del P.O. 7.4. en 2020 que no se ha modificado hasta el pasado junio. Además, destaca que en este tiempo se han superado diferentes proyectos piloto y varios procesos de información pública «en los que se recibieron posicionamientos críticos de una parte de la generación convencional«.
Las centrales de generación que actualmente participan en el servicio de control de tensión deben tener una capacidad para aportar o absorber potencia reactiva del 30% respecto a su potencia máxima, lo que para Red Eléctrica aporta suficiente potencia reactiva para su reacción a las variaciones de tensión en el sistema.
Con respecto a las capacidades de las centrales convencionales para prestar el servicio de control de tensión, Red Eléctrica asegura no tener constancia de que los reguladores hayan emitido exenciones que permitan prestar el servicio por debajo del mínimo establecido en la normativa.
«No hubo una falta de capacidad de reactiva programada en el sistema el pasado 28 de abril, sino que la misma no fue activada por los generadores en el momento en el que el sistema lo requería. Su aportación al sistema como establece la normativa hubiera reducido la dinámica de la variación de tensión que se produjo. Sin embargo, como ha quedado demostrado, los grupos no alcanzaron mayoritariamente el valor mínimo legalmente obligatorio, con respuestas lentas o insuficientes a la variación que desencadenó los eventos posteriores», ha destacado.
En cuanto a los límites de tensión en la red de transporte que gestiona y que Aelec ha puesto en entredicho, Red Eléctrica señala que los 435 kilovoltios (kV) son los que establece la regulación española al menos desde 1998 «y lo ha confirmado la normativa europea más reciente».
«Operar con un valor máximo de 420 kV implicaría un cambio estructural; su aplicación en el sistema actual multiplicaría los costes asociados a las restricciones técnicas y no se podría asegurar que, con los recursos disponibles actualmente, dicho valor no fuera superado», ha aseverado la compañía.
La patronal de Iberdrola y Endesa ha puesto el foco en estos niveles, señalando el poco margen actual sobre el nivel de los 440 kV donde hay riesgo de sobretensiones que pueden producir apagones.
«Por último, el servicio de control de tensión mediante las consignas de reactiva no aporta al sistema flexibilidad de adaptación a variaciones rápidas de tensión. De ahí la necesidad de que las instalaciones puedan controlar tensión también en modo de consigna de tensión», ha concluído.