Amazon se enzarza con la CIG por la huelga en su almacén de O Porriño
La multinacional que preside Jeff Bezos ha reivindicado que sus empleados de O Porriño trabajan en un entorno "moderno y seguro, con salarios y beneficios competitivos" después de que el comité de empresa convocase una jornada de huelga para el 23 de diciembre
Imagen de archivo de trabajadores de Amazon
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Cruce de declaraciones entre Amazon y la CIG a cuenta de la huelga convocada para el próximo 23 de diciembre en su centro logístico de O Porriño. La multinacional estadounidense ha defendido este viernes las condiciones de trabajo en esta estación logística y ha reivindicado que sus empleados de O Porriño trabajan en un entorno «moderno y seguro, con salarios y beneficios competitivos».
Amazon, que también cuenta con un centro logístico en el concello coruñés de Cambre, ha subrayado en declaraciones a la agencia Europa Press que los salarios que ofrece la empresa están por encima del convenio colectivo provincial del sector logístico, con un salario de entrada de más de 1.500 euros brutos mensuales «y beneficios valorados en miles de euros anuales como el seguro médico privado, seguro de vida, planes de pensiones o permiso parental ampliado y retribuido».
«Por otro lado, las personas trabajadoras de Amazon cuentan con oportunidades sólidas de desarrollo profesional y promoción interna», han añadido las mismas fuentes.
La CIG denuncia «sobrecarga» de trabajo
Amazon ha respondido así después de que trascendiese que los casi 100 trabajadores del centro logístico de Amazon en O Porriño están llamados a secundar una jornada huelga que, según informó el sindicato CIG (mayoritario en el comité), tendrá lugar el 23 de diciembre, para exigir mejores condiciones laborales y denunciar la «sobrecarga» de trabajo que padecen.
El comité criticó que la empresa abusa de la contratación parcial y fija discontinua e incurre en incumplimientos en materia de prevención de riesgos. Por ello, convocó un jornada de paro y una concentración a las 10.00 horas del día 23, delante de las instalaciones, en el polígono de A Granxa.
El sindicato denunció ritmos de trabajo «excesivos» por la «sobrecarga» derivada de la falta de personal, incumplimientos en seguridad y salud laboral, contratación precaria o jornadas en domingo «sin remuneración».
