Manuel Añón, el ‘rey gallego del acero’, superó los 730 millones en ventas con la inflación pero ganó la mitad

Hierros Añón, el conglomerado en manos del empresario larachés Manuel Añón sigue encadenando beneficios millonarios, aunque estos menguaron a la mitad en 2022, último año del que hay datos oficiales. Ese mismo ejercicio, la cifra de negocios de la compañía volvió a estirarse un contundente 20%, hasta los 734 millones de euros. En la escalada del conglomerado metalúrgico tiene mucho que ver su considerable crecimiento inorgánico. A pesar de que el ejercicio del estallido de la inflación no llevó a cabo nuevas compras, el 2021 adquirió tres empresas –Tubos del Mediterráneo, Tubos Legutiano Automoción y Tubos Mecánicos, con la filial Tubos Mecánicos del Norte–. Con estas adquisiciones, en dos años, sus ingresos se duplicaron, desde los 300 millones de euros que registró en 2020.

Recientemente depositada ante el Registro Mercantil y consultada por Economía Digital Galicia, la memoria consolidada de Hierros Añón correspondiente al ejercicio 2022 indica que, ese año, el grupo disparó sus ventas de los 618 a los 734 millones de euros mientras que se anotó un resultado de explotación, el propio de la actividad de la compañía, de 66,7 millones de euros frente a los 108 millones de 2021. La firma de Manuel Añón –empresario que, en su día, vendió junto a Epifanio Campo a los Rubiralta la actual factoría de Celsa en A Laracha— sufrió el aumento de costes, algo que se notó en sus ganancias. El beneficio neto del grupo se redujo a la mitad, de 81,5 a 39 millones de euros.

Con un patrimonio neto que se elevó en un ejercicio de los 357 a los 397 millones de euros, los activos de la compañía alcanzaron los 706 millones. Las deudas a largo plazo se minoraron de los 52 a los 40,5 millones (28 millones en concepto de deuda con entidades de crédito), mientras que a finales de 2022, la deuda a corto, es decir, inferior a un año, alcanzó los 182,5 millones (170 millones con los bancos).

Un 2023 atenazado por los costes

Como le pasó al resto de empresas del sector del acero, los administradores de Hierros Añón indican, al respecto del crecimiento de sus ventas, que el ejercicio 2022 se caracterizó por “las alzas significativas en el precio del acero”. En concreto, en la primera parte del año hubo una tendencia de subida de precios, motivada por el incremento de las materias primas y los incrementos de costes energéticos y logísticos que se fue corrigiendo a la baja en la segunda mitad del año.

A la espera de conocer las cifras del grupo en 2023, en su último informe de gestión, la compañía del empresario larachés ya advertía de que esperaba unos resultados en línea con los de 2022. Superarlos sería complicado debido, precisamente, al aumento de los costes que continuó experimentando el sector durante el pasado ejercicio. “Esperamos un año con una rentabilidad algo más ajustada y sujeta a la volatilidad de los precios”, pronosticaban.

De los 734 millones de euros de facturados en 2022, 617 millones de euros proceden del mercado nacional (ventas realizadas en el país de origen de cada una de las sociedades dependientes), mientras que 39 millones de euros proceden del mercado europeo y 75 del mercado extracomunitario.

Resultados por sociedades

A cierre del ejercicio, la compañía rozaba los 900 empleados. Por sociedades, en 2022, Gallega de Mallas arrojó un beneficio de 7 millones de euros mientras que Hierros Añón SA logró unas ganancias de 6,5 millones. Comercial de Laminados Ibérica se anotó un resultado positivo de 14,3 millones mientras que Perfiles de Aragón  pasó de un beneficio de 22,1 millones de euros en 2021 a 4,3 millones de euros. Gallega de Cordones y Alambres, con sede en As Pontes contabilizó un beneficio de 2,2 millones mientras que Hierros del Turia finalizó con un positivo de cuatro millones.

También se anotaron beneficios millonarios las últimas adquisiciones del empresario. Tubos Mecánicos finalizó 2022 con una ganancia de 5,1 millones mientras que Tubos Mecánicos Norte logró 7,4 millones. Tubos del Mediterráneo, por su parte, acabó con un neto de 4,5 millones mientras que Tubos de Legutiano Automoción regresó a beneficios, con un positivo de 1,1 millones.