Colas para ingresar dinero en efectivo
ING, el grupo financiero holandés que se ha abierto un espacio en el disputado mercado bancario español, decidió abrir algunas oficinas físicas después de colarse entre la clientela del país a través de internet. Una de esas oficinas, situada en la Diagonal de Barcelona, es un verdadero chollo. Después de abrirla hace apenas un año, los empleados no dan abasto a recibir ingresos de grandes cantidades en efectivo que buscan los productos de alta rentabilidad de ING. Entre los últimos y primeros días del mes llegan a producirse colas de clientes con fajos de billetes de todos los colores dispuestos a ingresarlos en sus cuentas. Los empleados son incapaces de saber a qué obedece esa curiosa tendencia.