La caída de Oriol Pujol tras el tropezón de las ITV
La implicación del secretario general de CDC, Oriol Pujol Ferrusola, en el caso de las ITV ha sido recibido en su propia formación política de dos formas diferentes. Mientras una parte del aparato del partido mantiene el discurso de que la justicia española ha hecho explotar el caso de presunto tráfico de influencias en el momento actual para frenar las aspiraciones soberanistas del grupo político, tal como él mismo manifiesta en una carta enviada a la militancia, otra parte se frota las manos.
Quienes están más felices con la reiterada aparición de Pujol Ferrusola en el sumario del caso son aquellos miembros de la cúpula que han encontrado una excusa perfecta para dejar caer al hijo del expresidente de la Generalitat. Consideran que el suyo es un cargo inmerecido, por vía hereditaria, y que ahora es el momento de apartarlo del verdadero núcleo de poder. Entre estos, no falta casi ningún miembro del llamado pinyol, un grupúsculo de dirigentes, coetáneos todos ellos del propio Pujol Ferrusola, que llevan las riendas del partido y del Govern junto a Artur Mas.
Pujol Ferrusola aparece dibujado en el sumario del caso de las ITV como el cerebro político de varias operaciones en las que la justicia ha apreciado claros indicios de tráfico de influencias, además de otras figuras presuntamente delictivas. El político queda muy vinculado a Sergi Alsina, el socio director de la consultora Alta Partners, con quien parece compartir la organización y el diseño de todo tipo de actividades vinculadas al mundo de los negocios. La propia esposa de Pujol Ferrusola aparece implicada en el sumario en una trama de presuntas facturas falsas cruzadas con Alta Partners. La juez del caso reabrirá interrogatorios y pesquisas el próximo septiembre.