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Ya no hay marcha atrás para Alcampo: estos son los supermercados que cerrará en España
Hasta 16 supermercados de Alcampo repartidos por diversos puntos de España echarán el cierre como consecuencia del ERE confirmado hace escasos días
Ninguna empresa tiene la obligación de aceptar la jubilación parcial
La cadena de distribución Alcampo ha hecho oficial la lista de establecimientos que bajarán la persiana en los próximos meses en el marco del ERE aprobado este hace escasos. En total, serán 16 supermercados los que cerrarán sus puertas en distintas comunidades autónomas, afectando directamente a cientos de trabajadores y marcando un antes y un después en la estrategia de la compañía en España.
El ERE, que ha sido pactado con los sindicatos, con la especial presencia de Fetico como principal sindicato negociador, contempla la salida de 565 empleados, una cifra que finalmente se ha visto reducida respecto a los 710 despidos inicialmente planteados por la dirección. A cambio, la empresa ha accedido a mejorar las condiciones de indemnización de los afectados.
Los cierres confirmados de Alcampo en todo el país
Un recorte de plantilla y de establecimientos que afectará a diferentes puntos de la geografía española, destacando especialmente en la Comunidad de Madrid, donde la compañía de origen francés ha decidido cesar la actividad en siete de sus supermercados. Precisamente en Madrid, la lista oficial de supermercados que cerrarán sus puertas incluye el de Calle Puentelarra, el de Calle Andrés de Ahumada, el de Calle Uruguay, el de Calle Ermita del Santo, el de Calle Simón Hernández, el de Calle Nazario Calonge, y el de Plaza de Toro.
Entre ellos, destacan especialmente los cierres de Ermita del Santo y Nazario Calonge, ya que en cada uno de estos centros trabajan 28 empleados, los más afectados de toda la lista. No obstante, no será la única región afectada, ya que, por ejemplo, Castilla y León verá desaparecer seis establecimientos: dos en Burgos, en Medina de Pomar y Miranda de Ebro; uno en León, en Bembibre; uno en Valladolid, en Laguna de Duero; y dos en Zamora, el de capital y el de Toro.
En Galicia, cerrarán los supermercados situados en Catabois y Arteixo, además del de Burela. Por otro lado, en Navarra, el centro afectado será el de Ansoain. Y por último en el País Vasco, bajarán la persiana los de Coronación en Vitoria y el de Barakaldo en Vizcaya. Una serie de cierres que, en total, suponen una reducción de la red comercial de Alcampo en 16 puntos de venta, distribuidos por todo el territorio nacional.
Las condiciones pactadas con los sindicatos reducen el impacto laboral del ERE
Sin embargo, no todas las condiciones del ERE son negativas. Gracias a las negociaciones con los sindicatos, el ERE pactado incluye condiciones económicas que mejoran ligeramente las planteadas inicialmente. Los trabajadores recibirán una indemnización de 35 días por año trabajado, con un máximo de 20 mensualidades, una propuesta que ha permitido alcanzar el acuerdo con los representantes sindicales.
Además de ello, se ha establecido un tratamiento especial para ciertos colectivos, entre los que se encuentran los empleados con discapacidad igual o superior al 33%, aquellos diagnosticados con cáncer o enfermedades graves, las víctimas de violencia de género o terrorismo, las parejas de hecho o matrimonios en los que uno de los miembros esté incluido en el ERE, y las mujeres embarazadas. Todos ellos han quedado excluidos del proceso de despido para preservar su estabilidad laboral.
Además, otro punto importante del acuerdo es la limitación del número de afectados mayores de 50 años, que no podrá superar las 200 personas. Además, la adscripción al ERE será voluntaria, con un plazo de solicitud que estuvo abierto entre el 16 y el 25 de junio, por lo que quedarán protegidos tras este ERE.
Sin embargo, el ajuste no sólo supone cierres. Cinco supermercados y tres hipermercados cambiarán su modelo de negocio para pasar a un formato de apertura de siete días a la semana, uno de los aspectos que más dudas generó en las negociaciones con los sindicatos, y que ha quedado resuelto tras llegar a un acuerdo común.
Por otro lado, para aquellos empleados que acepten este cambio de condiciones laborales se ha previsto una compensación económica única que oscilará entre 2.000 y 3.000 euros, abonada en tramos durante 12 meses. Asimismo, el acuerdo contempla la creación de 35 nuevas vacantes indefinidas que se ofrecerán a perfiles diversos dentro de la compañía, con la intención de recolocar a una parte de los trabajadores afectados por la reestructuración.