Salvador Illa dejará este martes el Ministerio de Sanidad para centrarse en las elecciones catalanas

El candidato socialista deja su puesto como máximo responsable de la pandemia a solo tres semanas de que se celebren los comicios en Cataluña

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (i), junto al número uno del PSC al 14F, el ministro Salvador Illa (d), durante el Comité Federal del partido en la sede del PSC en Barcelona celebrado este sábado en un gesto de apoyo a Salvador Illa ante las elecciones catalanas./ EFE

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (i), junto al número uno del PSC al 14F, el ministro Salvador Illa (d), durante el Comité Federal del partido en la sede del PSC en Barcelona celebrado este sábado en un gesto de apoyo a Salvador Illa ante las elecciones catalanas./ EFE

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Salvador Illa dejará este martes su puesto como ministro de Sanidad para poder centrarse en la campaña de las elecciones autonómicas de Cataluña del próximo 14 de febrero. El máximo responsable de la pandemia ha apurado hasta el último momento y contará con tres semanas para tratar de ultimar la estrategia con el objetivo de arañar votos al independentismo.

El candidato socialista ha escogido esta fecha para poder acudir por última vez al Consejo de Ministros y dar por cerrada su andadura en el Gobierno, después de un año de un protagonismo inesperado como consecuencia de la crisis sanitaria que ha provocado la Covid-19.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comunicará el mismo martes quién se encargará de dirigir desde entonces el Ministerio de Sanidad. La ministra de Política Territorial, Carolina Darias, es la que cuenta con más papeletas para ponerse al frente de la gestión sanitaria en plena tercera ola de contagios. La toma de posesión en el Palacio de la Zarzuela está prevista para el miércoles.

La decisión de Salvador Illa de abandonar el barco en este momento desencadenará algunos cambios más en el Consejo de Ministros. El puesto que actualmente ocupa Darias puede acabar en manos del que fuera el primer secretario del Partido Socialista de Cataluña, Miquel Iceta. Así, se cierra el círculo.

 Illa deja su puesto tras las fuertes críticas de la oposición

Salvador Illa comunicó el pasado 30 de diciembre que se presentaría a las elecciones catalanas como cabeza de lista del PSC. Sin embargo, ha tardado casi un mes en abandonar su puesto como ministro de Sanidad. La demora ha provocado fuertes críticas por parte de la oposición que le ha acusado de no dedicar tiempo completo a combatir la pandemia.

Partido Popular, Ciudadanos, Vox o el PdeCat han presionado en las últimas semanas para que el candidato socialista dejase libre el ministerio de Sanidad y se centrase en la competición electoral sin el plus de protagonismo mediático que le otorga su puesto. Sin embargo, siempre se ha negado en rotundo.

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, analiza la situación epidemiológica en Españadurante una rueda de prensa convocada este sábado, en la Delegación del Gobierno en Barcelona. EFE/Marta Pérez
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, analiza la situación epidemiológica en España en rueda de prensa. EFE/Marta Pérez

Las críticas llegaron incluso desde sus socios de gobierno. La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, le sugirió que actuará con “rapidez” para sumarse a la campaña electoral. “La pandemia requiere de toda la concentración”, advirtió la política de Unidas Podemos.

A pesar de las presiones, Illa defendió que permanecería en el puesto hasta que se iniciase la campaña electoral. La decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) de mantener definitivamente la llamada a las urnas en el 14 de febrero ha propiciado que se vea obligado a dejar ya su responsabilidad.

Illa se suma a la campaña electoral tras el impulso de las encuestas

Salvador Illa ha aprovechado además la coyuntura que le han ofrecido las últimas encuestas sobre estimación de voto. El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) le ha situado como el hipotético vencedor de los comicios con un apoyo del 23,9% de los catalanes que se traduciría en una representación de entre 30 y 35 escaños en el Parlament. Una mayoría que sin embargo deja en el aire la presidencia ya que requeriría el apoyo de Esquerra Republicana.

El organismo dirigido por José Félix Tezanos ha sido el más generoso en sus estimaciones, aunque los datos están condicionados por una participación electoral del 67% de la población catalana. Un dato que los partidos no creen que se alcance por el contexto de la pandemia.

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