Alcampo negocia con el ERE: propone rebajar los despidos y ampliar el horario de los supermercados
Las negociaciones entre Alcampo y los sindicatos ahora incluyen la posibilidad de reducir el número de despidos bajo ciertas condiciones
Alcampo ha puesto sobre la mesa una nueva propuesta para reducir el impacto del ERE que afecta a su plantilla en España. En el marco de la quinta reunión con los sindicatos, la empresa ha planteado una rebaja en el número de despidos, que pasarían de 710 a 510 empleados, a cambio de implementar la apertura de algunas tiendas durante los siete días de la semana.
Las claves de la última propuesta de Alcampo, al descubierto
El sindicato mayoritario en las negociaciones, Fetico, ha reconocido avances en las conversaciones, aunque matiza que el acuerdo «todavía no está cerrado». La dirección de Alcampo estaría dispuesta a limitar los despidos si se acepta ampliar el modelo de negocio, abriendo más tiendas en domingos y festivos, y mediante la transformación de algunos formatos comerciales y el ofrecimiento de vacantes internas.
Con todo ello, la compañía busca compatibilizar la reducción de despidos con una adaptación a los nuevos hábitos de consumo. Para ello, ha vinculado directamente la rebaja del número de afectados al cambio en los horarios de apertura y a una redistribución interna del personal. Una propuesta que, por otro lado, ya cuenta con algunos puntos clave.
Comenzando, evidentemente, por reducir en 200 empleados el número de despidos inicialmente previstos, pasando de 710 a 510, siendo este un cambio considerable. Para ello, en Alcampo consideran imprescindible reconvertir superficies de hipermercado en tiendas más pequeñas y eficientes. Algo que, por otro lado, pate de la base de ofrecer nuevas vacantes internas como alternativas al despido.
Todo ello, además, gira en torno a otra clave: extender la cobertura de indemnizaciones a trabajadores de hasta 63 años. Precisamente esta última medida se antoja como una de las más importantes, ya que permitiría cubrir con mayores garantías a empleados con más antigüedad, un colectivo especialmente vulnerable en este tipo de procesos, lo cual resulta uno de los pilares fundamentales que se ha marcado Alcampo.
Especial importancia a la protección de colectivos sensibles y nuevas indemnizaciones
Por otro lado, uno de los avances más significativos ha sido el acuerdo para limitar los despidos de trabajadores mayores de 50 años. Alcampo ha aceptado el planteamiento de Fetico para que un máximo de 200 personas de este grupo puedan verse afectadas por el ERE, lo que representa un esfuerzo de protección hacia una franja laboral con mayores dificultades de reempleo.
Además, se han logrado compromisos específicos para mujeres embarazadas y personas con reducción de jornada, que quedarán protegidas mediante un porcentaje máximo de afectación. Estas excepciones forman parte de una política de negociación más sensible hacia los colectivos en situación más vulnerable, lo cual se ha consolidado como otro de los factores fundamentales del proceso de reconstrucción.
Por otro lado, en lo relativo a las indemnizaciones, la empresa ha planteado un paquete de compensaciones de 27 días por año trabajado, con un tope de 15 mensualidades, para todos los empleados menores de 63 años. Como incentivo adicional, se ofrece una compensación de 3.000 euros a quienes acepten voluntariamente reducir su jornada completa a parcial para ocupar nuevas vacantes.
Debido a todo esto, el plan de ajuste de Alcampo responde a una crisis estructural del modelo de hipermercado en España. Anunciado el pasado 8 de mayo, el proceso afecta a 25 supermercados que cerrarán y a 15 hipermercados que reducirán su superficie comercial. Este rediseño llega tras un descenso del 1% en sus ventas nacionales, hasta los 5.004 millones de euros en 2024, y en un entorno donde cadenas como Mercadona continúan ganando cuota de mercado.
Por ello, desde la empresa señalan que el comercio está viviendo «una profunda transformación», marcada por el auge del comercio digital, la demanda de tiendas más pequeñas y cercanas, y un consumidor cada vez más exigente con la sostenibilidad y la eficiencia. Un nuevo panorama al que Alcampo quiere adaptarse con un modelo multiformato y multicanal, capaz de competir en agilidad y personalización sin renunciar a su escala.