Airbnb te propone dormir como un aristócrata inglés

Garden House es una residencia para ocho personas cercana al palacio de Sandringham House, que la corona británica alquilar por Airbnb a 410 euros la noche

Vistas de la Garden House, cercana al palacio de Sandringham. Foto Airbnb

Sí, es posible dormir como un rey. O más bien, como una reina, porque la monarca Isabel II ofrece en Airbnb una de sus numerosas propiedades reales para ser alquilada por noche o por semanas.

Se trata de la Casa del Jardín (Garden House) de Sandringham Estate. Lo que está en alquiler es la residencia del jefe de los jardineros, no el fastuoso palacio de estilo jacobino construido en 1870, donde la familia real suele pasar las Navidades y que ha sido usado como refugio más de una vez cuando los escándalos sacudían los cimientos de la corona británica.

Cómo es la casa en alquiler

La propiedad se encuentra cerca de la ciudad de Norfolk -a 160 km de Londres- y pertenece a la familia real, no al estado británico. Por ello la monarca es libre de alquilarlo por Airbnb sin pedir permiso a nadie.

Las vistas desde una de las salas. Foto Airbnb

Por supuesto que “los jardines son una auténtica delicia y proporcionan un entorno magnífico para esta idílica casa”, precisa la descripción del portal de reservas.

Lo que se alquila es la antigua residencia del jefe de jardineros, no el fastuoso palacio donde la reina y su familia suelen pasar las fiestas de Navidad

Algunos muebles pertenecen a la Royal Collection. Foto Airbnb

La residencia, que sigue el estilo del palacio con su fachada de ladrillo, cuenta con comodidades para ocho personas distribuidas en las cuatro habitaciones que se encuentra en las dos plantas.

La casa por dentro

En la planta inferior están el hall de entrada, un comedor sencillo y otro formal con una mesa para ocho personas frente a la chimenea, y con hermosas vistas de los extensos parques (en total la residencia real se encuentra en un terreno de 8.100 hectáreas)

Allí también hay una sala de estar, otra con chimenea y TV, otra para desayunar, una cocina, un guardarropa y un lavabo para invitados.

En la superior se encuentran los dormitorios: dos tienen camas King-size y otros dos cuentan con camas individuales. Además allí hay dos baños, cada uno con su bañera.

El dormitorio principal. Foto Airbnb

La decoración y los jardines

Toda la finca cuenta con interiores modernos, de estilo ecléctico, alejado de la idea de estar en una propiedad de la nobleza; aunque algunos muebles pertenecen a la valiosa Royal Collection (la colección de arte privado más grande del mundo) y ofrecen una imagen de elegancia campestre.

Por razones de seguridad la casa no se alquila cuando la familia real llega a Sandringham para pasar las fiestas de Navidad

En tanto el jardín tiene un patio con suelo de piedra con mesas, sillas, una barbacoa y un sector de césped ideal para que corran los perros (pero no se puede llevar más de tres animales)

Los jardines de la propiedad. Foto Airbnb

Eso sí: los huéspedes tienen que limitarse a pasear por los jardines de la Garden House, delimitados por un pequeño muro con grandes macetas. No pueden ir libremente a los terrenos de Sandringham Estate, aunque sí pueden programar una visita como cualquier turista.

Alta demanda

El precio por noche es desde 410 euros. Y es tal el deseo de los británicos de sentirse parte de la realeza que la alta demanda ha agotado las plazas hasta noviembre del año que viene.

Vistas del palacio de Sandringham. Foto: Wikimedia Commons.

Sin embargo, la propiedad no se alquila cuando Isabel II visita la finca, donde se queda hasta la primera semana de febrero. La fecha no es casual: su padre Jorge VI nació en ese lugar y falleció allí mismo, un 6 de febrero de 1952.

Al otro día Isabel fue elegida reina, y aún sigue al frente del reinado más largo de la historia del país.

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