La sorprendente vitalidad del arte urbano en L’Hospitalet

L’Hospitalet cuenta con un circuito de murales que no solo expresan una nueva forma de hacer arte, sino que canaliza las expresiones culturales y revitaliza los barrios

Obra ‘La Santa Estación’, de Nevenka Pavic.

No es casualidad que L’Hospitalet tenga una cultura de arte urbano tan potente. La segunda ciudad más grande de Cataluña -después de Barcelona- cuenta con una larga tradición vinculada a la industria gráfica, que desde mediados del s.XX se expandió con un interesante desarrollo de las artes plásticas.

El arte urbano no llegó por casualidad, sino que además de expresar una modalidad de crear fuera de los canales convencionales recibió el apoyo del Ayuntamiento para que crezca de manera organizada e integrada con el urbanismo y la cultura.

Homenaje a Andy Warhol realizado por Uriginal en Santa Eulàlia

Las raíces del arte urbano en L’Hospitalet

Por ejemplo, entre 1986 y 1990 en L’H Arts se realizaron diferentes instalaciones efímeras en diversos espacios de la ciudad, que se complementaron con los trabajos que desde aquella década se hacían en el centro TPK Arte y Pensamiento Contemporáneo, escuela dedicada a la formación, residencia e investigación artística.

O ya llegado el siglo XXI, donde la llegada de diferentes colectivos de artistas dio alas a la creación del Distrito Cultural de L’Hospitalet.

Obra de Yoseba que homenaje a los castellers y la infancia.

Los muros o las fábricas abandonadas de barrios como Santa Eulalia eran lienzos donde los talentos del espray creaban sus obras

En paralelo, desde los años ’70 y sobre todo en los ’80 el arte urbano daba sus primeros pasos, donde los muros o las fábricas abandonadas de barrios como Santa Eulàlia eran lienzos donde los talentos del espray creaban sus obras.

Eran tiempos donde no había límites claros entre la expresión artística y el gamberrismo, en que los murales realizados con dedicación y talento tenían que lidiar con los tags, las firmas que creaban los graffiteros para recordar una efímera conquista del espacio público.

Columnas en la entrada del metro Santa Eulàlia-Riera Blanca con la obra ‘Totems’ de diversos artistas de L’HaTonal

Alas al arte urbano en L’Hospitalet

Para darle un nuevo carril a estas expresiones artísticas desde el 2015, en el Centre Cultural La Bóbila, se comenzó a poner en marcha diversas iniciativas para dar alas al arte urbano, algunas vinculadas a proyectos sociales y culturales.

“El objetivo fue recuperar el espíritu de la ciudad renacentista, donde el arte urbano adquiere un protagonismo importante, recuperando espacios degradados”, puntualiza Ricardo Castro Navío, director de ese centro cultural.

Una de estas primeras acciones fue Dona la cara per la teva ciutat (Da la cara por tu ciudad), donde 10 artistas recuperaron las persianas del mercado de Can Vidalet, con el homenaje a vecinos y edificios emblemáticos de L’Hospitalet.

Mural promoción de la 6a edición del Concurso de Cómic y Dibujo Collblanc- La Torrassa. Mural de Manoluts

Los tres años siguientes fueron de una intensa actividad de promoción de este arte, con actuaciones en los puentes ferroviarios del Canigó en Sant Josep-Florida (con obra de Monkey Fingers) o la Avenida Carrilet (entre Santa Eulàlia y Sant Josep, con trabajo de Ampparito)

Cabe destacar al mural del puente Isabel la Católica (Sant Josep-La Florida), realizado por Esteban Martin, que en su momento fue el mural más grande de Europa, con 1.000 m2; o la producción de 12+1, donde durante tres años han participado 30 artistas nacionales e internacionales para dar color y vida a la salida del metro de Torrassa.

Recuerdo a Johan Cruyff en La Florida, realizado por Kram.

Acciones en La Florida

En los bloques de vivienda de La Florida desde 2017 se realizaron varias acciones en las medianeras para recuperar el espacio público y el sentido de pertenencia de los vecinos.

Uno de los murales destacados es Duality, del artista brasileño ErbMon, habitual escenografía de artistas de rap y hip-hop como Morad (natural de ese barrio), donde los dos triángulos y el cuadrado representan un mensaje de convivencia ante el conflicto. Según la publicación especializada Street Art in Action este es un mural de visita obligatoria.

Força, Llibertat, Alegria, de Btoy

Los vecinos, trabajadores, la historia y las tradiciones de L’Hospitalet son algunos de los homenajes del arte urbano de la ciudad

En otros bloques se pueden ver las obras Florece de Jericó; Força, Llibertat, Alegria de Btoy; Te Leo de Elsa Capdevila y Música de Kamil; que homenajean a las mujeres, las abuelas y a la escuela Pau Vila, respectivamente.

Duality, de ErbMon

Homenajes y reivindicaciones

La historia vecinal y fabril de L’Hospitalet, las tradiciones populares, figuras de la cultura, el recuerdo de los trabajadores y de diversas iniciativas sociales han quedado reflejadas en columnas de viaductos, muros, fachas de fábricas y bloques de viviendas.

Y nos solo han sido realizados por artistas de relevancia, sino también por colegios, fundaciones para la integración social, colegios vecinales y academias de arte.

Mural en el marco del Festival Berdache. Álvaro Sola por Teo Vázquez

Acciones futuras

Mientras estas acciones periódicamente van dotando de color las calles de la ciudad el Ayuntamiento realiza un trabajo sistemático de documentación, donde el Museu de L’Hospitalet ha creado un fondo fotográfico de las obras que se van realizando.

Además desde el 2017 el Ayuntamiento ha restaurado algunas obras que se han deteriorando.

‘Energy’, de Monkey Fingers.

Y la rueda del arte urbano sigue girando: el nuevo proyecto Arte con energía, impulsado por el Ayuntamiento local con Endesa, propone cambiar la imagen de la fachada de la subcentral eléctrica de la carretera de Collblanc y de 50 armarios de distribución urbana en diferentes barrios.

Los jóvenes de la ciudad que participarán crearán grafittis sobre el cuidado del medio ambiente y la sostenibilidad del entorno urbano, y serán realizados con materiales facilitados por la empresa.

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