Mas aceptó reuniones que organizó Prenafeta con constructores

Prenafeta negó haber llamado a Mas, pero la fiscal le mostró el audio en el que le decía que acudiera a la cita acompañado de Gordó

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El ex secretario de presidencia de la Generalitat, Lluís Prenafeta, reconoció este martes en el juicio del caso Pretoria que pidió a Artur Mas que se reuniera con un “controvertido” constructor que perseguía la recalificación de unos terrenos. Y Mas aceptó el encuentro. En un primer momento, Prenafeta negó que en 2009 hubiera llamado a Mas para proponerle que se reuniera con Lluís Casamitjana, presidente de Espais, una constructora ya liquidada. Espais pretendía desencallar una recalificación de terrenos en Cerdanyola del Vallès (Barcelona) a la que se oponía el grupo municipal de CiU. La Audiencia Nacional archivó su imputación.

Caso Pretoria: Prenafeta pidió a Mas y Gordó que desayunarán con un “controvertido” constructor

Entoces la fiscal Ana Cuenca le mostró el audio de la conversación, obtenido con la preceptiva autorización judicial, en que Prenafeta pide a Mas que se reúna con el empresario: “Un señor quiere desayunar contigo porque quiere facilitar cosas. Es controvertido, de Terrassa y dice que quiere, en fin,… (…) Tu deberías conseguir que venga Germà Gordó”. En aquellos momentos, Gordó era el gerente de Convergència. Mas aceptó aquella reunión.

Reconoce que cobró comisiones de hasta el 4%

Prenafeta admitió que cobró comisiones por mediar en adjudicaciones públicas y que defraudó a Hacienda 14,9 millones de euros. «Reconozco los hechos y los acepto tal y como están», dijo el que fue uno de los hombres de confianza del expresidente Jordi Pujol en relación a su participación en las llamadas operación Niesma y operación Badalona, que llevó a cabo la trama corrupta.

El ex alto cargo de Convergencia ha reconocido así, como ya hizo el exconsejero Macià Alavedra, que cobró comisiones a cambio de intermediar a favor de empresarios que optaban a conseguir adjudicaciones públicas, de entre un 3 y un 4%, y ha confesado además que blanqueó dinero.

La fiscalía pide para Prenafeta una pena de seis años y diez meses de cárcel y una multa de 13,7 millones de euros por los presuntos delitos de tráfico de influencias y blanqueo.

Economía Digital

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