La nueva ley hipotecaria exigirá más transparencia y garantías a los bancos

El Gobierno contempla que en la nueva ley sea más fácil cambiar de hipoteca o amortizarla. Además, obliga a los bancos a advertir al cliente de cualquier riesgo

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Más luz sobre la futura ley hipotecaria. El Gobierno ha enviado este lunes al Consejo de Estado un anteproyecto de ley con la idea de aprobar toda la tramitación parlamentaria requerida después del verano. El ejecutivo contempla en la nueva legislación más transparencia para el cliente y mayores garantías para que éste pueda cambiar las condiciones del préstamo, así como ir amortizándolo con un coste menor que en la actualidad. El resto de novedades se centran en la prevención de casos similares a las cláusulas suelo y la flexibilidad en el interés de demora. 

Según recoge el texto, se darán más facilidades para cambiar de una hipoteca variable a una fija y viceversa, gracias a la reducción de los costes de subrogación. De este modo, el banco que concedió inicialmente el préstamo solo puede recibir una compensación por este cambio de condiciones en los tres primeros años de vida de la hipoteca. Por su parte, los gastos notariales – como, por ejemplo, los de la escritura – quedan reducidos «al mínimo», según han explicado fuentes del departamento que dirige Luis de Guindos.

Muchos aspectos difieren de si la hipoteca contratada es a plazo fijo o variable

Entre el resto de medidas que protegen al deudor hipotecario, está la posibilidad de amortizar anticipadamente un préstamo y que el banco sólo pueda recibir una compensación «limitada». Este aspecto difiere del tipo de hipoteca, dependiendo si es a tipo fijo o variable.

Para el primero de los casos la comisión de reembolso será del 3% en los cuatro primeros años y del 4% a partir de entonces. 

Mientras, una hipoteca a interés variable podrá amortizarse anticipadamente pagando una comisión por la cantidad entregada del 0,5% en los tres primeros años. Esta cantidad bajará al 0,25% hasta el quinto año, cuando quedará reducida a cero.

Prevención ante un conflicto similar a las cláusulas suelo

Para evitar episodios como los de las cláusulas suelo se obliga a los bancos a entregar en un primer momento al cliente una ficha con los datos básicos del préstamo. En ella se advertirá claramente de las condiciones, al tiempo que se desglosará quién asume cada uno de los distintos gastos hipotecarios.

El Gobierno tratará de impedir conflictos similares al de las cláusulas suelo advirtiendo a los clientes de todos los riesgos

Un notario será el encargado de comprobar que el cliente ha recibido toda esta información, antes de que el mismo  vuelva a la notaría a firmar un préstamo que el fedatario no podrá dar por bueno si existen cláusulas declaradas abusivas por la justicia.

Para evitar que haya controversia –como está sucediendo ahora con los vencimientos anticipados o los intereses de demora– la nueva ley eliminará que estos aspectos se negocien. Así, jamás quedará la duda de si son abusivos.

Ampliación del interés de demora

En la nueva legislación el interés de demora será tres veces superior. Además, se establecen nuevos plazos para que el banco pueda pedir el vencimiento anticipado de una hipoteca.

El interés de demora será tres veces superior en la nueva legislación

Hasta ahora, el banco consideraba al cliente moroso a partir del tercer mes de impago de la cuota hipotecaria. Una condición que le permitía, entre otros, iniciar los trámites para embargar el inmueble. No obstante, se elevará  el umbral y el cliente entrará en impago cuando en la primera mitad de la vida del préstamo deja de pagar el 2%.

Economía Digital

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