El Gobierno retrasa a 2023 la cotización por ingresos reales de autónomos como pedía CEOE

Los sindicatos piden conocer los tramos de las cuotas y las bases mínimas y UPTA está "radicalmente en contra" de los 9 años de transición

Reunión mesa de diálogo sobre trabajo por cuenta propia

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El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha decidido retrasar un año, hasta enero de 2023, la entrada en vigor del nuevo sistema de cotización por ingresos reales para los autónomos, tal y como reclamaba la patronal CEOE, con un periodo transitorio para su adaptación de nueve años, punto este último que ha suscitado cierto rechazo entre los sindicatos.

Esta decisión ha sido trasladada por el secretario de Estado de la Seguridad Social y Pensiones, Israel Arroyo, durante su reunión con los interlocutores sociales para continuar con el diálogo iniciado tras la aprobación en el Congreso de las recomendaciones del Pacto de Toledo, según han confirmado a Economía Digital en fuentes del diálogo social. 

Durante su comparecencia en la Comisión del Pacto de Toledo en el Congreso, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, fechó en el 1 de enero de 2022 la entrada en vigor de la reforma del régimen de autónomos, recogida en la recomendación cuatro del Pacto de Toledo, sin embargo finalmente ha decidido plantear su aplazamiento a 2023, tal y como reclamaba la patronal.

En trabajo conjunto con el Ministerio de Hacienda, Escrivá detalló que el nuevo régimen de cotización  partirá de 13 tramos para aportar flexibilidad y adaptación a la capacidad de pago del trabajador autónomo, que podrá elegir provisionalmente su base de cotización en función de previsiones de rendimientos, con la posibilidad de modificar su elección varias veces a lo largo del año.

Periodo de adaptación de nueve años y hasta seis cambios

El Ministerio plantea ahora retrasar al 1 de enero del próximo año la entrada en vigor del nuevo régimen de cotización por ingresos reales de los autónomos, fijando un periodo de transitoriedad de nueve años para su adaptación y contemplando que se pueda cambiar hasta seis veces de base de cotización.

Fuentes del diálogo social han señalado que el consenso en torno a la postergación del sistema al próximo año ha sido generalizado, mientras que se han producido reticencias respecto al periodo de transición de nueve años. Los sindicatos también reclaman conocer los detalles sobre los tramos y las bases de cotización.

El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, ha señalado en declaraciones a Economía Digital que con la postergación de la entrada en vigor del nuevo sistema de cotización «hay tiempo suficiente para ir negociando» y poder disponer de todos los informes técnicos necesarios para conseguir un «sistema garantista».

Amor ha valorado los nueve años de transitoriedad porque dará mayor plazo tanto para los que tengan que pasar a cotizar menos como a los que les corresponda pagar más, al tiempo que los autónomos podrán seguir eligiendo desde 2023 su base de cotización en función de su previsión de rendimientos netos, a regularizar posteriormente en 2024 con motivo de la Renta. 

Además de que se podrá cambiar seis veces de base de cotización, Amor ha marcado como tema “fundamental” que se concreten los tramos (el Gobierno planteó 13) y ha apuntado que desde ATA han trasladado la complejidad del sistema, compartida por la Administración, lo que ha conducido a postergar el sistema un año, hasta enero de 2023. 

UPTA , «radicalmente en contra» de los 9 años de transición

Por su parte, el presidente de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), Eduardo Abad, ha indicado a Economía Digital que no ha habido “nada nuevo” respecto a que los autónomos puedan cambiar hasta en seos ocasiones sus bases de cotización y regularizar la situación a final de año cuando se conozcan los resultados económicos anuales. 

Abad ha dicho que postergar la puesta en marcha del nuevo sistema en 2023 “no es un problema”, ya que se da margen para regularizar la situación económica este año, tener un 2022 “totalmente normal” y elegir ya en 2023 los tramos a encajar. 

Sin embargo, ha advertido de que su organización “no va a consentir bajo ningún concepto” que se alargue el periodo de incorporación de los autónomos al sistema durante nueve años en función de sus sistema de tributación, algo que ve «inaceptable» y se muestra «radicalmente en contra» porque «nada lo justifica.

En este sentido, ha defendido que «lo justo y necesario» sería que se incorporara todo el colectivo al sistema, y si no puede ser porque el sistema de control entre la Agencia Tributaria y la Seguridad social tiene problemas para contrastar la situación de renta de trabajo con la cotización, reclama que como «muy tarde» el 100% de autónomos esté en el mismo sistema de cotización el 1 de enero de 2025.

A su juicio, sería «inaceptable» el agravio comparativo que se produciría entre unos autónomos y otros, y cree que urge que se beneficien del sistema los que realizan un esfuerzo contributivo para rebajar sus cargas, especialmente a los que tienen ingresos por debajo de una cuantía similar al Salario Mínimo. En contraposición, cree que hay que subir los tramos de bases mínimas a los trabajadores por cuenta propia con una situación más ventajosa, como aquellos con rendimientos del trabajo superiores a los 25.000 euros anuales.

De cualquier forma, ha subrayado que sería un «absoluto disparate» que durante el mes de mayo el Ministerio no terminase de determinar definitivamente el documento en el que detalle los distintos tramos (en principio, 13) y las bases mínimas de cotización, ya que «ha tenido tiempo más que suficiente».

Retraso del sistema de cotización a tiempo parcial

De igual forma, el presidente de UPTA ha alertado sobre el retraso reiterado desde 2013 de la cotización a tiempo parcial de los trabajadores autónomos, situación bajo la que se encontrarían en torno a dos millones de trabajadores por cuenta propia no regularizados y cuya cotización a tiempo parcial podría ser una solución a la economía sumergida.

Entre otros, podrían figurar jóvenes que dan clases particulares a domicilio, músicos amateurs que hacen actividades económicas con actuaciones en locales públicos o personas trabajadoras que complementan su actividad por cuenta ajena con trabajos en la economía sumergida por cuenta propia.

El sistema de cotización de autónomos a tiempo parcial lleva aprobado desde 2013 por ley pero se ha ido aplazando su puesta en marcha, y ahora los sindicatos reclaman que se implemente y se avance hacia la cotización en función de los ingresos reales.

UPTA propone que la cotización a tiempo parcial se regule para como máximo 16 horas al mes con una remuneración máxima de 300 euros de ingresos, gestionándose directamente por el sistema Red para que cualquier ciudadanos que quiera realizar algún tipo de actividad por cuenta propia pueda pagar su cotización a través del sistema un día antes de d desarrollar la misma.

Sergio Martín de Vidales Diago

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