Aviso a clientes de Caixabank: Asufin denuncia la tarjeta MyCard ante el Banco de España

La asociación denuncia que presenta características que no son adecuadas para todos los consumidores y que conlleva al endeudamiento

Tarjeta Caixabank

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Atención a los clientes de Caixabank. Asufin ha denunciado ante el Banco de España el modelo de tarjeta de débito diferido o tarjeta ‘híbrida’ que estaría impulsando la entidad con MyCard al considerar que «presenta unas características que pueden no ser adecuadas para todos los consumidores», según ha señalado en un comunicado este viernes.

En su denuncia, la asociación explica que la tarjeta híbrida, que se puede usar tanto de débito como de crédito, permite liquidaciones inferiores a un mes, en concreto, semanales, y está disponible tanto para particulares como para autónomos, según informa Europa Press.

La asociación indica que en la opción de débito, esta tarjeta solo permite diferir el cargo un mínimo de dos días, por lo que no deja realizar un cargo inmediato a la cuenta bancaria. Además, incluye diferentes opciones de diferimiento de pago e incluso fraccionamiento de deudas.

«Campaña comercial agresiva»

Asufin denuncia que Caixabank ha iniciado «una campaña comercial muy agresiva para imponer la tarjeta MyCard desde principios de 2022 como sustituta de la de débito tradicional». Asufín explica cuál es el procedimiento que sigue la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri.

En primer lugar, la asociación explica que el banco informaría a los clientes que la tarjeta de débito, que hasta ahora no tenía coste cumpliendo determinados requisitos, pasaría a costar 36 euros anuales; la de crédito, 48 euros al año.

Posteriormente, la entidad recomendaría a los usuarios cancelar su tarjeta para sustituirla por MyCard, con débito en diferido y sin ningún coste, tal y como sostiene Asufin. «Es decir, aparentemente se da opción al cliente, pero se presenta una oferta más atractiva, la gratuidad, para renunciar a un servicio esencial como es la tarjeta de débito», sostiene la asociación.

La denuncia también indica que los usuarios que han presentado más quejan serían antiguos clientes de Bankia. En concreto, la asociación afirma que ahora estos usuarios tendrían que optar por una tarjeta de crédito «encubierta, sin coste aparente, cuando con Bankia su tarjeta de débito no tenía ningún coste cumpliendo determinadas condiciones«.

Sobreendudamiento

Sin embargo, a pesar de no tener coste «aparentemente», Asufin sostiene que en cada operación que realiza el consumidor «se está invitando a que aplace el pago, pudiendo ser el origen de un problema de sobreendeudamiento«. En el caso de la tarjeta MyCard, se permite fraccionamientos de hasta 12 meses, incluso después de que se haya hecho el cargo en cuenta, según recoge la asociación.

«Todas las modalidades de liquidación la asimilan a una tarjeta de crédito, lo que convierte un instrumento básico de pago, para emplear con el dinero disponible en cuenta, en un producto que invita al endeudamiento«, afirma la organización.

Dinero | pxhere.com
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Señala que la tarjeta de débito como un instrumento de control del gasto es una medida «para evitar el sobreendeudamiento», al cargar las compras sobre saldos. Sin embargo, las tarjetas de débito diferido «permiten comprar por encima del saldo» por la posibilidad de fraccionamiento de las operaciones en el momento de la compra y después.

Economía Digital

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