Codere reconoce que necesita la refinanciación de 34 millones
El grupo admite problemas de liquidez para atender a la banca y a los bonistas
La compañía de juego Codere ha reconocido que necesita refinanciar una línea de crédito de la que le faltan por liquidar 34 millones de euros, tal y como avanzó Economía Digital. La firma ha admitido que sufre problemas de liquidez para abonar dicha cantidad, según ha detallado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El vencimiento de esta deuda se producirá el próximo 15 de junio.
El grupo ha asegurado que en el corto plazo «se enfrenta a una situación de liquidez estrecha, derivada fundamentalmente de la indisponibilidad de fondos provenientes de Argentina desde julio de 2012 por los beneficios que el grupo obtiene en dicho país».
Codere ha subrayado que tiene dificultades para abonar en apenas dos semanas la línea de crédito senior (29,5 millones de euros). También está en duda el pago del cupón correspondiente al bono de 760 millones de euros (31,4 millones de euros).
Fondos insuficientes
La firma sólo dispone actualmente de un capital de 18 millones de euros, los fondos pignorados en España que sirven de garantía a un préstamo en Argentina (30 millones de dólares) y los flujos de fondos que reciba desde las subsidiarias en diferentes jurisdicciones por concepto de dividendos, devoluciones de préstamos, intereses y facturaciones comerciales, entre otros.
Ante las dificultades para liquidar las deudas financieras pendientes, Codere está en negociaciones con Barclays, BBVA, Credit Suisse y Houston Casualty Company. Pero, de no conseguir finalmente un acuerdo, los recursos de Codere «no serían suficientes» para cancelar la totalidad de sus vencimientos.
A la espera de un acuerdo
Sin embargo, la compañía que preside José Antonio Martínez Sampedro se muestra optimista y espera renovar el crédito antes del 15 de junio. Codere insiste en que el plan para refinanciar la deuda está alcanzando las expectativas, aunque en lo que se refiere a los acuerdos con proveedores «continúa en fase de negociación».
La compañía de juego sufrió la pasada semana un comportamiento irregular en Bolsa que le llevó a desplomarse en el Mercado Continuo y, al poco tiempo, convertirse en el valor que más ganaba. Su evolución coincidió con la rebaja de su rating aplicada por la agencia Moody’s.