Imaz refuerza su apuesta por Repsol comprando acciones por 178.000 euros

Josu Jon Imaz ha comprado acciones de Repsol por valor de 178.000 euros. El consejero delegado de la petrolera refuerza su apuesta por la compañía que dirige con la adquisición de nuevos títulos en el mercado el pasado viernes, día en que se celebró la junta general de accionistas en la que anunció aumentos del dividendo para los próximos años.

El CEO de la energética adquirió 15.000 acciones de Repsol a un precio unitario de 11,87 euros, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) consultados por este medio. La inversión, realizada el pasado 30 de mayo, supone un desembolso de 178.050 euros.

Se produjo el mismo día en que se celebró la junta general de accionistas, marcada por los mensajes reivindicativos tanto de Imaz como del presidente de Repsol, Antonio Brufau, pidiendo apostar por la neutralidad tecnológica en la Unión Europea, reducir la regulación y actuar con «realismo energético» ante el «buenismo» de países como China.

En cualquier caso, este tipo de operación, más allá de las acciones que obtiene Imaz como parte de su sueldo, son habituales por parte del directivo en los últimos años. Además, el consejero delegado de la compañía también se verá beneficiado por el aumento del dividendo que Repsol aplicará en los próximos años.

Repsol aumentará su dividendo hasta 1,1 euros por acción en 2027

De este modo, la petrolera anunció durante la junta que aumentarían la retribución al accionista de la misma forma que viene haciendo. En 2024, subió el dividendo en efectivo hasta los 0,9 euros por acción y ejecutó recompras y amortizaciones de 60 millones de acciones propias, elevando la remuneración al accionista hasta 1.928 millones.

«Invertir en Repsol es garantía de crecimiento del dividendo año a año», contestó Imaz a preguntas de sus accionistas. En esta línea, aseguró que la petrolera ha incrementado el dividendo un 34% desde 2022.

En 2025, el dividendo en efectivo de Repsol se va a incrementar hasta los 0,975 euros por acción, un 8,3% superior al de 2024, y continuará en la misma senda los dos años siguientes.

El CEO de la cotizada confirmó que la intención es subir la retribución vía dividendos hasta los 1,06 euros por acción en 2026 y, «con altísima probabilidad», superar los 1,1 euros en 2027.

En cuanto a la recompra de acciones, otra forma de remunerar a los accionistas, Repsol reducirá capital en 350 millones, de los cuáles 300 millones se obtendrán a través de un programa de recompra de acciones y los 50 millones restantes mediante la liquidación de derivados existentes.

Imaz señaló que dicha recompra se ejecutará por la volatilidad de precios del negocio en el que opera Repsol. Algo que le permite, cuando la caja es elevada, absorber la volatilidad y dar un mayor recorrido a la acción.

Las acciones de Repsol llevan dos años consecutivos cerrando en negativo, después del rally alcista que tuvieron a raíz de la crisis energética post pandemia por la guerra de Ucrania.

Situación que se da en un entorno marcado por la volatilidad de precios que han afectado a sus márgenes de refino y sus resultados financieros, las dificultades geopolíticas en algunas regiones donde operan como Venezuela y con nuevos proyectos en tecnologías verdes como el hidrógeno renovable que actualmente siguen generando dudas.

Con todo ello, Repsol no pierde la cara al mercado y su estrategia para con sus accionistas le hace mantener el equilibrio por ahora. Los títulos de la petrolera suben cerca de un 2% este lunes, hasta superar los 12 euros, mientras que se revalorizan en torno al 3,3% en el acumulado anual.