Los bonistas de Fergo-Aisa ganan la primera sentencia a Caixabank
La entidad financiera debe devolver 20.000 euros a un matrimonio aunque aún puede recurrir
Los bonistas de Fergo-Aisa han logrado una victoria muy importante para recuperar su dinero. Un juzgado de l’Hospitalet ha condenado a Caixabank a devolver 20.000 euros a un matrimonio de 80 años que adquirió deuda de la inmobiliaria a Bankpyme, entidad financiera que posteriormente fue absorbida por el banco que preside Isidro Fainé.
La batalla judicial hace tiempo que dura. El descalabro de Fergo-Aisa, firma actualmente en liquidación, dejó atrapados a 1.500 personas que invirtieron un total de 25 millones de euros. Las denuncias se centraron en un primer momento contra BankPyme, entidad que validó la operación, para intentar que se les restituyese el dinero que invirtieron con información falseada.
La defensa de Caixabank
Las sentencias que han aparecido sucesivamente desde mediados de 2013 dan la razón a los bonistas contra Bankpyme aunque eso no sirve para que recuperen su inversión: la firma se encuentra en situación concursal y, por tanto, sólo cobrarán una vez finalice el proceso y en caso que quede algo de dinero en la caja.
Por eso, las nuevas denuncias se centran en CaixaBank, que adquirió el negocio financiero de la compañía quebrada. Esta es la primera sentencia contra el banco de La Caixa y supone un empujón para que otros afectados sigan explorando esta vía. El escrito demuestra que el matrimonio, defendido por el abogado Carles Pastor, no fue debidamente informado sobre la situación de la compañía que emitió los bonos.
Argumentación
El banco catalán se ha excusado en todo momento argumentando que la problemática no era un asunto suyo. CaixaBank adquirió el negocio financiero pero no las responsabilidades en cuanto a las reclamaciones que se deriven de los productos financieros. Así, en el contrato figuraba que no existía posibilidad de sucesión universal en los pasivos contingentes.
La titular del juzgado de primera instancia de l’Hospitalet de Llobregat entiende que en la cesión de contratos que hicieron Banpyme y Caixabank no se puede separar los pasivos y las obligaciones. Por ese motivo, declara que el banco catalán tiene legitimiación pasiva en el procedimiento. La posibilidad de recurso por parte del condenado está abierta.
Fergo Aisa entró en concurso de acreedores a principios de julio de 2013. Su pasivo ronda los 250 millones de euros. Los juzgados mercantiles han dictado ya auto de liquidación de la firma. Sobre el consejo de administración, liderado por el empresario Carlos Fernández, recae un embargo preventivo de 116 millones de euros.