Yolanda Díaz visita a Wayne Griffiths (Seat) para sumar al automóvil al pacto de la reforma laboral

La vicepresidenta quiere acercar posiciones con Anfac después de que los fabricantes de automóviles se mostrasen críticos con el nuevo marco normativo. También se verá con los sindicatos

La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz (i) atiende a los medios al finalizar en el encuentro que ha mantenido con el secretario general de la CCOO en Cataluña Javier Pacheco . EFE/Enric Fontcuberta

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El viaje relámpago a Cataluña de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, tiene como prioridad sumar apoyos para la reforma laboral a las puertas de su tramitación parlamentaria. La ministra de Trabajo se vio este miércoles con la cúpula de CCOO y UGT en el territorio y el jueves se sentará con uno de los sectores más críticos con el nuevo marco normativo: la industria del automóvil. La dirigente se reunirá con el consejero delegado de Seat y flamante presidente de Anfac, Wayne Griffiths, del que espera un tono diferente del de su predecesor.

La líder de Podemos y Griffiths se verán las caras en la fábrica del grupo en Martorell (Barcelona). A pesar de que la compañía tiene aplicado un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) en marcha, vive un clima laboral tranquilo y no se esperan grandes recortes en los próximos meses, por lo que no se esperan conversaciones en este frente. Sí en la reconversión que vive el automóvil con la futura electrificación, que necesitará de menos mano de obra.

La lectura de la visita debe leerse en clave patronal. Wayne Griffiths fue nombrado la pasada semana presidente de Anfac en sustitución de José Vicente de los Mozos, cabeza visible de Renault en España. La organización empresarial es clave en la presión que sufre Antonio Garamendi en la presidencia de la CEOE: fue una de las patronales que no apoyó el pacto de la reforma laboral en el seno de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). Estuvo al lado de la catalana Foment del Treball y la madrileña CEIM entre los críticos con la gestión del directivo.

Más allá de la escasa relevancia que se dio a los afiliados a la CEOE durante la negociación con los sindicatos, la prevalencia del convenio sectorial sobre el de empresa fue el gran punto caliente del acuerdo. Agrupa bajo un mismo paraguas a pymes y multinacionales. No está de acuerdo Anfac.

Los fabricantes de automóviles acostumbran a contar con buenos convenios –también gracias a la fuerza de sus sindicatos– muy diferentes a los de las pymes del sector, pero la flexibilidad juega un papel muy importante. Más en un momento en el que las ventas de coches no se ha recuperado después del coronavirus y los centros productivos acumulan jornadas de cierre y ERTEs por la escasez de semiconductores.

Por ello, ni siquiera los sindicatos del sector salieron a defender la reforma laboral. En Seat, además, Matías Carnero, presidente del comité de empresa y primer español en la historia del comité de vigilancia de Volkswagen AG, cerró las listas del PSC en las últimas elecciones de la Generalitat de Catalunya. Díaz también se verá con los líderes de CCOO y UGT de Seat y está previsto que también trate de convencerlos de las bondades de la nueva norma.

A los representantes de los trabajadores ya les pidió el miércoles su apoyo para convencer a ERC de que apoye el texto sin modificaciones. El partido catalán no quiere que el convenio colectivo estatal prime sobre el autonómico.

De ahí el interés de la ministra de conseguir una foto con una gran empresa que calme las iras de buena parte de los empresarios contra el pacto y la refuerce ante de la tramitación parlamentaria. «Esta reforma laboral es una pena y no es la que necesita España. No iré a Moncloa a firmarla», dijo el domingo Gerardo Cuerva, vicepresidente de la propia CEOE y presidente de Cepyme.

El giro de Anfac con la llegada de Griffiths

El nombramiento de Griffiths se produjo en un momento en el que las relaciones entre Anfac y el Gobierno no pasaban por su mejor momento. El último episodio de tensión se vivió con el veto de los socialistas a las medidas de apoyo fiscal para la automoción. Además, desde la institución han expresado en repetidas ocasiones sus quejas por la lentitud del Perte de la automoción.

Se espera en el sector que las relaciones mejoren con la llegada del británico. Seat y el Ejecutivo tienen en marcha una gran alianza para desarrollar el coche europeo en España con los fondos europeos Next Generation EU. El Perte del automóvil es el mayor proyecto a financiar con el dinero de Bruselas y el dirigente y el presidente Pedro Sánchez no dudaron en promocionar la colaboración entre ambas partes.

Las tesis de Seat en España y su apuesta para producir vehículos eléctricos en la fábrica de Martorell (Barcelona) coinciden además con las políticas de electrificación defendidas desde el Ejecutivo, más hostil con el diésel y la gasolina.

José Vicente de los Mozos, su predecesor, contaba con el respeto de las administraciones y mantenía una relación fluida con el Ministerio de Industria. Sin embargo, a nadie se le escapaba que el dirigente era más próximo al Partido Popular que al PSOE. El directivo acudió en los últimos años a varios eventos del PP y fue nombrado presidente del recinto ferial IFEMA por su junta gestora, presidida por Isabel Díaz Ayuso.

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