Draghi no obtuvo la unanimidad del BCE para aprobar el programa de compra de deuda

Los bonos de Grecia quedan excluidos de las adquisiciones de la autoridad monetaria porque no son fiables

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El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, admitió hoy que la decisión de lanzar ahora el programa de compra de deuda no se adoptó por unanimidad, pero que sí contó respaldo de una gran mayoría del consejo ejecutivo de su entidad. Alemania y los países de su área de influencia, como Austria y Holanda, se han opuesto desde el principio al programa.

«Hubo una gran mayoría», precisó Draghi, que apoyó la medida, y sí un «consenso» en la asunción del riesgo compartido hasta una tasa del 20 %, de modo que el 80 % del riesgo de impago lo asumirá en solitario el banco central nacional que lo adquiera.

Los dos objetivos

El presidente del BCE insistió, asimismo, en que su programa de compra de deuda era «necesario» para la recuperación económica y para llevar la inflación más cerca del objetivo de la entidad, el 2%.

El BCE ha puesto en marcha un programa de compra de deuda pública y privada por valor de 60.000 millones de euros al mes, operación que empezará en marzo de este año y se prolongará hasta septiembre de 2016.

En términos proporcionales

La compra combinada de deuda pública y privada se realizará según la cuota de capital de cada país en la entidad, a través de su banco central nacional. El presidente del BCE justificó el lanzamiento del programa en el «persistente» nivel mínimo de la inflación, muy por debajo del objetivo aspirado por su entidad que, recordó, debería situarse «levemente por debajo» del 2%.

Draghi dejó hoy claro que la política monetaria debe ir acompañada «con rapidez» de reformas estructurales y recordó a «varios países» la necesidad de reformar el mercado laboral y de facilitar la actividad y las inversiones empresariales.

«Es crucial que las reformas estructurales se apliquen con rapidez», manifestó Draghi en rueda de prensa en Fráncfort tras la reunión del consejo de gobierno del BCE.

El Consejo Ejecutivo del BCE acordó asimismo hoy, según lo previsto, mantener los tipos de interés en su nivel actual, el mínimo histórico del 0,05 %, con el objetivo de apoyar la coyuntura económica y evitar una recesión.

Grecia queda excluida del programa

El BCE sólo autorizará la compra de bonos calificados con un grado de inversión en el mercado secundario con su programa de compra de deuda, lo que excluye por el momento a la deuda griega.

Este condicionante excluye por el momento a los títulos de deuda pública del país que más lo necesita, Grecia, que debido a la crisis que atraviesa, están calificados como bonos basura y no alcanzan el denominado grado de inversión, que implica una mayor seguridad de cobro.

Al ser interrogado al respecto, Draghi explicó que las reglas trazadas para este programa son generales y no apuntan a países concretos y que, de hecho, esta restricción no es nueva, ya se había aplicado a otras iniciativas del BCE como el programa OMT, que adquiría deuda en los mercados secundarios.

 

Economía Digital

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