Empresarios y académicos aplauden el Atlas Gallego de la Empresa Comprometida: “Es ya imprescindible”
Los expertos consideran que el Atlas Gallego de la Empresa Comprometida ofrece "una magnífica radiografía" de la apuesta de las compañías por la sostenibilidad y ponen en valor que su continuidad durante estos cinco años permite extraer conclusiones sobre los principales puntos de mejora y los retos todavía por resolver

Mayte Gutiérrez, gerente de la Asociación Gallega del Hidrógeno; Fernando González Laxe, expresidente de la Xunta; María Bastida, profesora del Departamento de Organización de Empresas de la Universidade de Santiago de Compostela; y Luis de Valdivia, presidente de Ecoener / Pablo Ares Heres
El Atlas Gallego de la Empresa Comprometida cumple su quinta edición y se consolida como una herramienta de referencia para la empresa gallega. La iniciativa impulsada por Economía Digital Galicia analiza los avances en materia de respeto con el medio ambiente, el entorno, el buen gobierno y las personas de un total de 72 empresas que aglutinan un volumen de negocio conjunto de 53.000 millones de euros.
«Es un documento ya imprescindible», ha subrayado el expresidente de la Xunta de Galicia, Fernando González Laxe. A su juicio, el Atlas ofrece una «magnífica radiografía de cómo se están comportando las empresas». En la misma línea se ha pronunciado Pablo Núñez, responsable de Relaciones Institucionales de Cobre San Rafael, que considera «necesaria» esta iniciativa para iluminar el camino a las empresas en materia de sostenibilidad. «Me parece un ejercicio fantástico de conocimiento de la empresa gallega», ha añadido Luis de Valdivia.
El presidente de Ecoener ha puesto de relieve la «valoración tan positiva con la que sale Galicia respecto a otras comunidades» pese a tratarse de una apuesta todavía «reciente» por parte de la empresa gallega. Sobre este punto pone el foco también la profesora del Departamento de Organización de Empresas de la Universidade de Santiago de Compostela, María Bastida. A su juicio, las firmas de la comunidad se «han incorporado más tarde, pero se lo han tomado mucho más en serio» que las de otras «comunidades que históricamente tienen la etiqueta de llevar la sostenibilidad en el ADN como es el caso de País Vasco«.
«Si alguien tiene que saber de la importancia de cuidar nuestros recursos somos nosotros«, ha recalcado Bastida, que ve todavía «puntos a mejorar» por parte de las empresas de la comunidad.
Las 72 firmas que han participado en esta quinta edición del Atlas Gallego de la Empresa Comprometida sostienen 243.000 empleos directos. Se trata, en su práctica totalidad, de entidades que tienen la consideración de gran empresa. Es por ello que Pedro Tasende, CEO de Aporta Comunicación, asegura que el «gran reto es saber cómo esto llega con capilaridad a las empresas de menor tamaño que están repartidas en todas nuestras comarcas«.
Tasende muestra su esperanza en que «estos datos sirvan de faro para que la gente empiece a tomar en cuenta que es necesario trabajar en estos campos. No solo la sostenibilidad ambiental sino también la social y la mejora de la gobernanza», ha añadido. Diego Mata, socio de Moonoff, ha subrayado la importancia que tiene para las propias empresas el hecho de someterse a este particular examen para poder cotejar posibles puntos de mejora en relación a otras compañías comparables.
En esta misma idea coincide Mayte Gutiérrez. La gerente de la Asociación Gallega del Hidrógeno considera que la tarea pendiente pasa por «hacer llegar el propósito de este Atlas al resto de empresas gallegas». Por su parte, Carlos Pozurama, director de proyectos de esta misma entidad considera que uno de los grandes valores añadidos del Atlas radica en su continuidad a lo largo de los años.
«Lo importante es ver el camino que recorres», ha defendido, antes de abogar por que estos trabajos «no sean una foto, sino un vídeo» y que permitan analizar los avances y los retos todavía pendientes en este ámbito.
Formación, agua y certificados ambientales, los puntos a mejorar
Respecto a las principales conclusiones de esta quinta edición del Atlas Gallego de la Empresa Comprometida, Fernando González Laxe celebra los avances en materias como la «gobernanza, la actuación en el entorno o medio ambiente», pero advierte también de las «llamadas de atención». Entre ellas, «la poca sensibilidad hacia el uso del agua», un elemento que considera «tan clave como la energía».
El expresidente de la Xunta y catedrático de Economía Aplicada en la Universidade da Coruña también lamenta «los escasos certificados medioambientales de la empresa» y los esfuerzos todavía insuficientes en materia de horas de formación para los empleados. «Es una responsabilidad no solo de empresas, sino también de las universidades y la propia Xunta a través de la política de incentivos y subvenciones», ha puntualizado González Laxe.