El tecnócrata fallido: España tiene un margen fiscal limitado
La deuda de la Seguridad Social es hoy de 126.177 mil millones de euros
«España tiene un margen fiscal muy limitado, y, además, un factor esencial es la calidad del gasto. Incluso cuando hablamos de elevar el gasto militar, éste puede fomentar el crecimiento, y tener efectos de desbordamiento sobre el resto de la economía que pueden ser significativos. Pero en esta cuestión son cruciales los detalles y el diseño del programa, tanto en términos de la calidad de la inversión, como de la evaluación de los impactos asociados sobre el crecimiento potencial». Son declaraciones del actual gobernador del Banco de España José Luis Escrivá en una entrevista conjunta realizada junto al presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, con el diario ‘El Mundo’ y el Süddeutsche Zeitung.
La observación que comparte Escrivá no es ninguna sorpresa. Lo sorprendente es que, quien pronuncia estas palabras es, ni más ni menos, el Exministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones (2020-2023) y autor intelectual de las medidas que probablemente hayan generado el mayor incremento de gasto, desequilibrio fiscal y deuda en las cuentas de la hacienda pública española a largo plazo.
La deuda de la Seguridad Social es hoy de 126.177 mil millones de euros. Cabe recordar que, pese al aumento de la recaudación que ha propiciado en los últimos años la mejora del empleo y la subida de la base mínima (por la revalorización del salario mínimo, un 61% desde 2018), el destope de la base máxima y las incorporaciones del mal llamado mecanismo de equidad intergeneracional (MEI) y de la cotización adicional de solidaridad, este remanente está siendo insuficiente para dar cobertura a todas las obligaciones de gasto. El año pasado, el coste de las pensiones ascendió a 204.000 millones de euros.
Para realizar estos desembolsos, el sistema de pensiones está inyectando dinero más allá de las aportaciones que realizan empresas y trabajadores. Concretamente, de las transferencias y los préstamos procedentes del Estado a través del Presupuesto General. Esto es, de la recaudación tributaria. Son tus impuestos.
El reciente examen de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), advierte que será necesario incrementar notablemente esta vía de financiación para poder soportar el incremento de gasto en pensiones previsto tras la reforma de Escrivá. Las pensiones necesitarán más de 85.000 millones procedentes de los impuestos para ser sostenibles en 2050. Más impuestos.
Este proceso no hará más que intensificarse en las próximas décadas, si acaso con más fuerza. El gasto público, si no se toman medidas, aumentaría hasta 2050 en 5,3 puntos de PIB (del 44,7% del PIB al 51,0%), de los que 3,2 puntos serían atribuibles a pensiones y 2 puntos a sanidad y dependencia.
El déficit primario (todos los ingresos del estado menos todos los gastos salvo intereses de la deuda), crecerá del 1% del PIB actual al 2,3% en 2050, pero el progresivo crecimiento del pago de intereses que pronostica la AIReF llevaría el déficit a un 7% en el mismo año, una cifra cercana al déficit de España durante los peores años de la crisis financiera, donde oscilaba entre el 9% y el 11% del PIB.
El nivel de deuda pública de España alcanzaría el 129% en 2050 frente al 101,8% actual. La clave en este escenario es el coste medio de financiación del sector público, que lleva aumentando años y la AIReF espera que se estabilice en el entorno del 3,5-4% del PIB en las próximas décadas. Niveles extraordinariamente altos si consideramos que hace apenas un par de años el sector público era capaz de financiarse casi gratis.
Algunos creyeron ingenuamente en la fantasía que un reputado tecnócrata introduciría un poco de racionalidad econométrica en el seno del gobierno socialista. Pero la reforma de Escrivá –que hoy afirma que no hay “margen fiscal”– aceleró el desequilibrio estructural del sistema de pensiones, aumentó los costes empresariales, mermó la renta disponible de los trabajadores y perjudicó la sostenibilidad de las cuentas públicas a largo plazo. Escrivá decidió elegir caminar por este sistema de parches en lugar de abrazar un sistema mixto con un pilar de capitalización y cuentas nocionales. Decidió echar la pelota adelante en lugar de trazar un cambio estructural para permitir la viabilidad del sistema.