El PSOE de Rafael Simancas recibió casi un millón de la trama Púnica

El empresario David Marjaliza aporta nueva documentación que revela pagos tanto a la formación socialista como al PP e IU

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Nuevos documentos aportados por el empresario David Marjaliza, uno de los principales implicados en la denominada trama Púnica, revelan numerosos pagos ‘en negro’ a distintas formaciones políticas madrileñas entre las que se encuentran el PSOE, el PP o IU.

El primer pago que consta en la documentación original de la caja B de las empresas de Marjaliza corresponde al PSOE del actual diputado Rafael Simancas. Así hasta conformar un montante de casi un millón de euros, 970.290 euros. Por su parte, los pagos efectuados al PP alcanzarían una cuantía de 105.489 euros y otros 15.025 euros serían para IU, según revela este lunes El Mundo

La nueva documentación está fechada entre 1999 y 2002. Se trata de una información ocultada por Marjaliza hasta la fecha, ya que en sus declaraciones durante el proceso siempre ha asegurado que la contabilidad ‘B’ de sus empresas fue quemada tras la filtración de un Guardia Civil. Estos nuevos documentos son, sin embargo, anteriores.

Entre algunos de los mayores pagos figuran el realizado al ayuntamiento de Pinto, de 240.000 euros por una recalificación, o los de 61.100 euros para el PSOE de Parla o al PP de Getafe por la adjudicación de viviendas. 

Todos estos datos están desde este lunes en la Audiencia Nacional, que estudiará la documentación para incorporarla al sumario del caso Púnica. En total, 33 manuscritos pertenecientes a las cuentas de las compañías de Marjaliza. 

Pagos a Tomas Gómez cuando era alcalde

Marjaliza sostiene que también realizó pagos como el de 3.450 euros en concepto de un regalo para Tomás Gómez cuando este era alcalde de Parla, en 1999, y en el que se mantuvo hasta 2008. 

Entre 1999 y 2002, periodo al que corresponden los nuevos documentos, la mayoría de municipios madrileños eran socialistas. Salvo el caso de Valemoro, donde Franciso Granados ejerció como alcalde hasta 2003. El dirigente popular fue el que instó a Marjaliza, según el testimonio de este último, a «quemar en un día de niebla» los documentos que acreditaban los pagos. 

 

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