Mas asegura que cualquier superávit de la Generalitat se dedique a enjugar deuda

Crea un fondo de reserva destinado a cancelar déficit y evitar nuevas operaciones de crédito. Cualquier excedente presupuestario irá a parar a este mecanismo

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El Govern de CiU ha creado un fondo de reserva de la Generalitat. El mecanismo nace sin ninguna dotación asociada, según fuentes de la conselleria d’Economia i Coneixement, y se usará para asegurar que cualquier superávit futuro se destine en primera instancia “a cancelar deuda o evitar nuevas operaciones de crédito”, tal y como se lee en la Ley de Estabilidad Presupuestaria que se ha publicado este martes.

Eso sí, las aportaciones al fondo no se harán a través del presupuesto coyuntural del año en curso. El cálculo de superávit se realizará a partir del saldo estructural, que también se define en la norma. El que está “ajustado al ciclo económico en relación al PIB catalán” si “la economía se mantuviera en la senda del crecimiento”.

Según explican desde el departamento liderado por Andreu Mas-Colell, es el mismo cálculo contable que se ha usado para realizar las balanzas fiscales.

Prioridad de las partidas

El objetivo prioritario del president, Artur Mas, es conseguir un déficit estructural del 0,14% del PIB catalán en 2018. Así lo incluye en el redactado. Por ello, también blinda legalmente que en todos los presupuestos del futuro “la ejecución de créditos destinados a satisfacer los intereses y el capital de la deuda pública” tengan “prioridad absoluta sobre cualquier otra partida de gasto”.

Asimismo, deja claro que es la conselleria de Mas-Colell la encargada de fijar el componente cíclico y el estructural de la liquidación presupuestaria de la Generalitat y todas las empresas públicas catalanas. Con la participación del Institut d’Estadística de Catalunya (IEC). Una decisión con la que también se quieren proteger de las posibles modificaciones que sufra el presupuesto catalán tras la intervención de la Administración General del Estado (AGE)

Es un pequeño blindaje más ante Madrid. Con todo, la meta final de CiU es el pacto fiscal y así lo incluyen en la ley. Pide diseñar “un nuevo marco de financiación” que permita “disponer de unos fundamentos de suficiencia en los ingresos y corresponsabilidad del Estado”. Condición que tachan de indispensable “para garantizar el mantenimiento de estas prestaciones a lo largo del tiempo”.

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