Aragonès y Armengol presionan al Gobierno con la financiación autonómica

El presidente de la Generalitat exige que el fondo Covid o uno "equivalente" se mantenga más allá de 2022 e insiste en el margen de mejora de los PGE

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y la presidenta de las Islas Baleares, Francina Armengol, en su primera reunión conjunta en el Palau de la Generalitat de la plaza Sant Jaume / Arnau Carbonell

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Restablecimiento de sinergias entre Cataluña y las Islas Baleares. El frente común por la gestión de los fondos europeos Next Generation, la reforma del sistema de financiación autonómica y los intereses comunes frente a la ley audiovisual y la reciprocidad entre TV3, IB3 y Àpunt han descongelado una relación, que mantenía una baja intensidad desde 2017.

Aragonès ha aprovechado la primera visita de la presidenta de las Islas Baleares, Francina Armengol, para exigir la cogestión de los fondos europeos Next Generation. Además, el mandatario catalán ha recordado que la pandemia no ha terminado, y ha exigido que este fondo, o uno equivalente, se pueda incorporar más allá de 2022.

Preguntado sobre la posición de ERC ante los PGE, el president ha asegurado que «una semana es una eternidad en la tramitación parlamentaria». En cuanto a la ley audiovisual insistido en las reclamaciones de la Generalitat respecto a la futura norma. «Es absolutamente necesario que esta ley quede clarificada y quede reflejada la adecuada protección del catalán».

Una postura que ha refrendado su homóloga balear, que ha insistido en que una de las apuestas por diversificar la economía en el territorio insular pasa por la producción audiovisual, y ha asegurado que «no es posible pensar que se excluya el catalán, y seguiremos trabajando».

Aragonès insiste en el margen de mejora de los PGE

Aragonès, que en una entrevista en Cadena SER había asegurado que las negociaciones para aprobar las cuentas catalanas de 2022 iban por el buen camino, ha asegurado que su objetivo primordial es «poderlos aprobar», y ha apelado a su acuerdo con la CUP, basado en un «programa de gobierno compartido» que obtuvo el apoyo de 74 diputados en el Parlament.

Sí que han habido algunas discrepancias sobre los PGE. Aunque Aragonès ha asegurado que el borrador del proyecto de cuentas para 2022 no cuenta con resultado favorable para Cataluña, Armengol ha insistido en que son «buenos presupuestos de políticas sociales». «Aumentan el gasto en algunas cuestiones. Para Baleares, tienen una partida de factor insularidad por primera vez«.

La presidenta del Consell de Govern de les Illes Balears ha roto el deshielo con Cataluña que se vivía durante el mandato de Quim Torra. Los objetivos estratégicos del eje Palma-Valencia, que pretende hacer frente común desde la periferia para cambiar el sistema de financiación o la consecución del Corredor del Mediterráneo, convierten al Govern de Aragonès en un aliado crucial.

El eje Palma-Valencia que interpela a Cataluña

Una sintonía similar se vivió tras la visita oficial de Aragonès a Valencia, cuando se reunió con el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig. Aunque no consiguió arrancarle el compromiso de ir a la conferencia de presidentes a batallar por una nueva financiación autonómica, sí que se establecieron sinergias sobre esta cuestión, y otros intereses compartidos.

La relación entre Armengol y Puig pretende profundizar en la descentralización y trasladar parte del poder de decisión a la periferia. Un frente que también camina por la armonización fiscal frente a lo que ellos consideran «dumping fiscal» de Madrid, una propuesta que –aunque no se ha tratado específicamente en la reunión– cuenta con la simpatía de Cataluña.

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