Aragonès se someterá a una cuestión de confianza a medio mandato
El candidato de ERC a la presidencia explica en un artículo al diario 'Ara' que el pacto con la CUP asegura la investidura y la investidura
El vicepresidente del Govern en funciones de presidente, Pere Aragonès, en un acto preelectoral de ERC en Lleida, el 23 de enero de 2021 | EFE/RG/Archivo
Pere Aragonès imita a Carles Puigdemont y se someterá a una cuestión de confianza ante el Parlament a medio mandato. El candidato a la presidencia de la Generalitat ha publicado una carta en el diario Ara donde explica que esta medida de control forma parte de lo acordado con la CUP.
«Estoy convencido y así hemos convenido con la CUP que es bueno y sano que cuando sea presidente de la Generalitat me someta a una cuestión de confianza a media legislatura para evaluarnos, para renovar el acuerdo y para reforzar la estabilidad del Govern», ha defendido Aragonès.
El actual vicepresidente ha explicado que el compromiso, que todavía tiene que ser ratificado por los órganos internos de la CUP, «asegura la investidura y la aprobación de los presupuestos». Según Aragonès, el someterse al dictado de la CUP otorga «estabilidad totalmente necesaria» a la legislatura.
«Primera piedra de la nueva Generalitat republicana»
El acuerdo supone la «primera piedra de la nueva Generalitat republicana» para hacer un Govern de «luchas compartidas» y para «avanzar en los grandes consensos» de la sociedad catalana. ERC se ha lanzado a proclamar el acuerdo pese a las tiranteces con Junts, que con 32 escaños es imprescindible para tirar adelante su candidatura.
La CUP y ERC dieron a conocer su acuerdo de forma abrupta el pasado domingo, ante la sorpresa de Junts. La suma de los dos partidos solo alcanza los 42 escaños, muy lejos de los 68 apoyos necesarios para alcanzar la mayoría absoluta. El partido de Puigdemont está sorprendido, y evitan hablar de Aragonès como candidato a la investidura.
Los junteros se han sentido desplazados del pacto, y han insistido en que el acuerdo no está cerrado y que las carpetas entre formaciones siguen todavía abiertas. Uno de los principales escollos ha sido el papel de las relaciones exteriores, con el polémico Consell per la República de Carles Puigdemont.
