Docentes catalanes protestan por la persecución del castellano en las universidades

Los profesores universitarios catalanes pierden la paciencia. La Plataforma Universitaris per la Convivència, de la que forman parte más de 200 profesores de todas los campus catalanes, ha denunciado la persecución al castellano en las aulas tras la orden de la Generalitat de elaborar informar para detectar que profesores no usan el catalán en sus clases y ha pedido que se condena la violencia contra estudiantes constitucionalistas.

En septiembre el Govern elaboró un plan para la inmersión lingüística del catalán en las universidades y, desde entonces, consideran que el uso del español está amenazado. «Durante décadas, alumnos y profesores nos hemos expresado con plena libertad en las aulas en castellano y catalán. Sin embargo, ahora se quiere crear un problema donde no lo había«, asegura en una carta remitida a los rectores de las ocho universidades públicas de Cataluña a la que ha tenido acceso El Mundo.

A través de esta nueva norma, las universidades tendrán que remitir informes semestrales a la Consejería de Universidades, dirigida por Gemma Geis (Junts), en los que se detalle en qué lengua se ha impartido la clase y cualquier incidencia que se haya producido. De esta forma, el Ejecutivo catalán busca que las clases se impartan en la lengua que indica el plan de docencia, sin cambios de última hora, para “garantizar los derechos lingüísticos de los alumnos y el profesorado”.

Los profesores denuncian que se sienten intimidados

En opinión de los docentes que forman parte de esta organización, en el nombre de los principios de transparencia y seguridad, «se fomenta la delación y la investigación, en definitiva, la intimidación de quienes se atreven a usar en clase, siquiera sea puntualmente y en atención a sus alumnos una lengua distinta a la anunciada».

«El poder aspira al atropello de convertir la universidad catalana en un eslabón más de la cadena con la que pueda someter a toda la sociedad a la causa del nacionalcatalanismo»

Y continúan: «Hoy en Cataluña el poder aspira al atropello de convertir la universidad catalana en un eslabón más de la cadena con la que pueda someter a toda la sociedad a la causa del nacionalcatalanismo y el precio es sacrificar las libertades públicas de los que discrepan con esa causa».

A través de esta dura misiva, han instado a los rectores ha decidir si van a ser «protagonistas de este empeño liberticida o si, de acuerdo con la dignidad de su cargo, van a enfrentarse a él». «Todavía están a tiempo de asumir su responsabilidad en defensa de la libertad de todos», han apuntado los docentes.

«Las universidades catalanas deben dejar de asumir como propias, y por tanto de todos nosotros, las posiciones ideológicas que sólo son de algunos», han concluido.