La Audiencia Nacional pedirá investigar a Iglesias en el caso Tándem

El juez Manuel García-Castellón retiró este lunes la condición de perjudicado del vicepresidente dentro del caso Dina, inserto en el sumario

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El juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón, instructor del caso Tándem, que investiga las actividades supuestamente delicitivas del excomisario de la Policía Nacional, José Manuel Villarejo, retiró este lunes la condición de perjudicado al vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, en una pieza separada dentro del sumario que trata de esclarecer el supuesto robo del smartphone de Iglesias; el conocido como ‘caso Dina’, en referencia a su exasesora, Dina Bousselham. 

En esta pieza se investiga el robo en 2015 del móvil de Bousselham, en un principio, atribuido a Villarejo. Según el juez, existen indicios de que Iglesias cometiera al menos dos delitos -revelación de secretos y daños informáticos- por lo que dejaría en manos de la Audiencia Nacional la tramitación para que sea el Tribunal Supremo el que investigue el caso. 

La declaración de Bousselham el pasado día 18 ha provocado el giro en la investigación. Según declaró la exasesora de Iglesias -actualmente al frente del diario La Última Hora, cabecera de la formación morada– cuando Iglesias le dio la tarjeta SD de su telefóno móvil en julio de 2015 esta ya estaba dañada y no se pudieron recuperar los datos; ni siquiera tras mandarla a Alemania a una empresa especializada. 

Iglesias, a su vez, declaró en marzo del año pasado que la tarjeta le llegó a través del presidente del grupo Zeta, Antonio Asensio, en enero de 2016. Bousselham aseguró no saber por qué el secretario general de Unidas Podemos tardó tanto en entregarle la tarjeta, pero confesó que no supo qué había en su interior. 

La fecha, clave

Es aquí donde reside la clave por la que García-Castellón ha retirado la condición de perjudicado a Iglesias. El juez considera que pudo retener la tarjeta en un periodo de entre «cinco a 39 meses», por lo que «no puede datarse con precisión», según consta en el auto. 

Bousselham también reconoció en su comparecencia que ella misma hizo el pantallazo a las conversaciones que más tarde aparecerieron publicadas en OkDiario y señaló que las envió «a terceras personas», por lo que el juez considera que «tampoco resulta posible vincular las publicaciones aparecidas en el referido periódico digital exclusivamente a la intervención» de Villarejo. 

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