¿Prisa en RTVE? Los profesionales de la cadena pública denuncian contratos con periodistas de la SER
Los periodistas de TVE critican la designación de Javier Ruiz como presentador del programa 'La Claves del Siglo XXI', mientras el talento interno sigue "infrautilizado", y temen un marcado deje ideológico
RTVE: cruce de acusaciones entre la dirección y el Consejo de Informativos por un viaje a Tinduf. EFE/Sergio Barrenechea/Archivo
TVE lanza un guiño a Prisa. La televisión pública pondrá en macha el programa Las Claves del Siglo XXI presentado por el periodista Javier Ruiz, un fichaje externo procedente de la Cadena SER que ha dejado mal sabor de boca a los trabajadores de la televisión pública, que han visto desmerecido el talento propio al traer a un profesional procedente de la competencia a RNE.
Una cuestión que estalló en otoño de 2021, con las críticas del Consejo de Informativos (CdI) al desprecio por la producción propia, y consiguieron arrancarle a la dirección el compromiso de que Javier Ruiz dimitiría de la SER antes de comenzar su andadura por RTVE, algo que no parece nada claro ante la inminencia del programa, según explican fuentes conocedoras.
«La Dirección de Informativos asegura a este CdI que se trata de un programa completamente de producción propia, que se hará con recursos y personal de la casa y dependerá de los Servicios Informativos. La única persona externa será Javier Ruiz quien, según las mismas fuentes, abandonará la SER próximamente. Esperemos que sea así», recoge el comunicado del Consejo.
Según denuncian críticos con la dirección de RTVE, no queda claro que Ruiz vaya a desvincularse por completo de la emisora del grupo Prisa, lo que les hace pensar que no se dedicará a la nueva apuesta del viernes por la noche de la televisión pública de forma exclusiva, y que rompería la promesa que el director de Informativos, Esteve Crespo, hizo a los trabajadores.
Una incertidumbre que ejemplifican vía Twitter los periodistas Miguel Ángel Idígoras y Carmen Sastre, esta última miembro del consejo de administración de RTVE. La veterana reportera ahora jubiliada insistía a través de las redes sociales que, mientras se apostaba por Ruiz para llevar el programa «grandes profesionales de plantilla siguen infrautilizados».
Idígoras le respondió a la reportera con la promesa de la dirección de informativos hecha al CdI sobre la desvinculación de Jesús Ruiz de la emisora privada, algo que ninguno de los dos sabe cómo ha quedado resuelto resuelto.»Quiero suponer que en algún momento se aclarará», ironizó la veterana periodista.
«Lo que va a hacer RTVE es que buena parte sea personal propio, porque cuando la dirección lo planteó en septiembre sufrió las mismas quejas con Jesús Cintora», explican las citadas voces internas. Unas quejas motivadas por la importación de trabajadores ajenos a la cadena y que hacían temer por un marcado deje político del programa a favor de Podemos.
¿Un presentador con «marcado carácter»?
Fuentes de la televisión pública explican que es un riesgo «que venga gente con un marcado carácter» como el caso de Jesús Ruiz, que sitúan «cercano al Gobierno» y que creen que forma parte de una maniobra para «tratar de apuntalar u orientar este programa en concreto en esa línea». La diferencia con Cintora será, en este caso, que el equipo que le asista será de RTVE.
«Con esta nueva dirección, con la nueva presidencia de Pérez Tornero se están intentando poner en marcha programas como el de Cintora, al que acusaron de estar muy escorado hacia Podemos, y ahora con la llegada de Ruiz procedente de la SER parece que hay un intento también de controlarlo desde fuera», denuncian las consultadas fuentes.
El precedente más reciente fue el programa de Jesús Cintora, que terminó retirado de la parrilla de la televisión pública y tuvo en jaque a los principales sindicatos de RTVE, puesto que se contó con periodistas de fuera de la cadena para llevar a cabo una redacción paralela cuyos contenidos querían rivalizar con Al Rojo Vivo de La Sexta.
El CdI llegó incluso a pronunciarse contra Cintora, al que acusó de «minar la credibilidad» del ente público. Un programa que terminó por desaparecer con el relevo de Rosa María Mateo por José Manuel Pérez Tornero al frente de la corporación, y que provocó aireadas reacciones tanto en ERC como en Unidas Podemos.
