Sánchez Llibre será reelegido presidente de Foment al no tener rival

La patronal catalana se reunirá el 17 de julio para ratificar su reelección por otros cuatro años y a su nueva ejecutiva

En la imagen, el presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre. /FTN

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Josep Sánchez Llibre renovará por otros cuatro años al frente de Foment del Treball tras haber finalizado el plazo para presentar candidaturas a las tres de la tarde de este lunes sin que nadie se inscriba para disputarle la presidencia. La noticia se produce sin sorpresas, ya que el pasado viernes el empresario presentó un total de 350 avales para su candidatura, multiplicando por siete los mínimos necesarios.

De esta manera, la patronal catalana se reunirá para ratificar a Sánchez Llibre y a su nueva junta el domingo 17 de julio, día en el que habrían tenido lugar las elecciones de existir más candidaturas.

Será su último mandato

El presidente de Foment se ha mostrado como el patrón de todas las empresas en Cataluña, de todo el territorio y de todos los sectores y tamaños, reivindicando que su patronal no es solo la de las grandes empresas, sino también la mayoritaria en pymes, un espacio monopolizado hasta ahora por Pimec.

Además, Sánchez Llibre asegura tener buena relación con Pimec y con Antoni Cañete, su presidente, aunque Foment está dando un giro después de la derrota en los tribunales por la no aceptación de Fepime, su filial de pymes, en las mesas de negociación, que quedaron con un 50% de representatividad para Foment y 50% para Pimec.

En la presentación de las líneas maestras de su proyecto el pasado viernes, el líder de la patronal explicó que los tres ejes de su nuevo y, según anunció, último mandato, son «liderar la respuesta económica que Cataluña necesita en estos momentos»; «mejorar la competitividad de nuestro tejido empresarial» y apostar por las pymes.

También habló de la necesidad de un pacto de rentas para que se suban los salarios pero se abandone la intención de incrementarlos como la inflación, lo cual, según Sánchez Llibre, sería insoportable para el tejido productivo: “Las empresas no pueden trabajar a pérdidas”.

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