Los Osborne dan el visto bueno a las cuentas del Grupo
Caídas en los principales márgenes por la venta de Solan de Cabras con sustancial reducción del endeudamiento.
Hoy El Puerto de Santa María (Cádiz) se ha vestido de fiesta para recibir a los cerca de dos centenares de accionistas del Grupo Osborne, todos ello pertenecientes a la familia en mayor o menor afinidad, para aprobar la cuenta de resultados del pasado ejercicio.
El ingreso proveniente de la venta, aproximadamente unos 25 millones, se destinó a la recompra de un paquete de acciones (15%) en manos de los antiguos propietarios de Solan de Cabras, -los Del Pozo-, ajenos a la familia, y a reducir su deuda a la mitad.
Caída del 6% del Ebitda
Así, la facturación pasó de los 248 millones de euros en 2010 a los 207 millones en 2011 mientras que el Ebitda se redujo cerca de un 6% hasta los 33 millones.
Por unidades de negocio, Bebidas y Vinos representa el 71% de la contribución del grupo y la unidad de Ibéricos -donde se incluye el negocio de Restaurantes- aporta el 29% restante. Geográficamente, el negocio internacional representa ya el 19% de la contribución, correspondiendo el 81% restante al mercado doméstico.
El presidente del grupo, Tomas Osborne Gamero-Cívico, destacó en el discurso ante la familia que se aumentaron las ventas de bebidas espirituosas en España en un 12%; también el lanzamiento de su nueva línea de negocio de franquicias de Toro con la apertura de dos tiendas en Madrid y Salamanca, y la apertura de cuatro nuevos restaurantes de la cadena 5J situados en Madrid, Barcelona y Lisboa.
Perspectivas y objetivos para el 2012
Las perspectivas de la compañía para el ejercicio en curso son razonablemente optimistas, dentro de un contexto de crisis económica y de descenso generalizado del consumo.
El plan estratégico del grupo para este ejercicio persigue el fortalecimiento de sus principales marcas apostando por mejorar su posicion premium, a la vez que se impulsa el negocio internacional.
El presidente está claramente orientado a reforzar el negocio mediante operaciones de crecimiento inorgánico –adquisiciones, alianzas…- que generen valor al accionista.